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¿Alguna vez te has preguntado cuál es el verdadero impacto de la lectura en los primeros años de vida? En MiPrimerColegio, creemos firmemente que la aventura del aprendizaje no tiene por qué esperar. Hoy, queremos compartir una conversación fascinante que tuvimos con Briseida Benítez, una profesional exitosa que nos revela cómo su temprana iniciación en la lectura marcó un antes y un después en su vida.
Dale play a nuestro video y descubre los secretos de un desarrollo integral desde la infancia:
La experiencia de Briseida es un testimonio viviente de los beneficios de la lectura desde edades tempranas. Aquí te compartimos los puntos clave que no te puedes perder:
Una Lectora a los 4 Años: Briseida nos cuenta cómo aprendió a leer a la temprana edad de cuatro años, impulsada por su curiosidad y el deseo de unirse a su mamá en la escuela primaria.
El Salto a Segundo Grado: ¡Imagina la sorpresa de su maestra! Con solo 5 años y a punto de cumplir los 6, Briseida demostró tal dominio de la lectura que fue directamente a segundo grado de primaria. Esto resalta el poder del ambiente familiar y la estimulación temprana.
Un Hogar Lleno de Libros: Descubre cómo crecer en un entorno donde los libros y la lectura eran parte del día a día, gracias a la pasión de su madre, fue fundamental para su desarrollo.
Impacto en Todas las Materias: Briseida enfatiza cómo esta habilidad temprana no solo la benefició en español, sino que le abrió puertas a una mejor comprensión en matemáticas y otras áreas a lo largo de toda su vida académica y profesional.
El Poder del Pensamiento Matemático: La conversación se extiende a la importancia de las matemáticas no solo como cálculos, sino como una herramienta fundamental para la resolución de problemas en la vida diaria.
Roberto: Hola a todos, bueno, bienvenidos a este video donde lo que nosotros queremos es compartir con ustedes historias de éxito acerca de la lectura y escritura temprana. Personas que comenzaron alrededor de los 4 años a leer, a escribir y que nos compartan un poco acerca de su experiencia de vida. En esta ocasión, tenemos una invitada especial: es mi hermana, se llama Briseida Benítez. Y pues Briseida, eh, te pido por favor que nos compartas un poco acerca de cuál es tu experiencia profesional, a qué te dedicas y que nos cuentes un poco más acerca de ti.
Briseida: Claro que sí. Pues muchas gracias, Roberto, antes que nada por invitarme. Y bueno, pues te comparto que soy licenciada en Instrumentación Electrónica y tengo estudios de maestría en Control. Me encanta estar siempre aprendiendo, siempre también sirviendo. Y empecé mi carrera en un campo técnico en Comisión Federal de Electricidad en Veracruz. Me sentía muy contenta, pero la vida me fue llevando por otro camino. Así es de que me casé, cambié de ciudad, ahora radico en Torreón, Coahuila y se me abrió la oportunidad de entrar a trabajar en el servicio público municipal. Al mismo tiempo comencé a dar clases en universidades y bueno, esto fue un descubrimiento para mí, nunca pensé que me pudiera dedicar la verdad a la educación, pero heme aquí. Después dirigí algunas instituciones en licenciatura y posgrado. Más adelante di un giro a la educación básica. Actualmente me desempeño como directora de una secundaria técnica rural donde he encontrado una vocación muy profunda, donde veo que pequeños cambios pueden transformar por completo la vida de los estudiantes. Me apasiona despertar vocaciones y sobre todo formar buenas personas.
Roberto: Quiero que nos enfoquemos y regresemos al tema central acerca de la importancia de la lectura y escritura temprana. Mi madre es, fue maestra durante toda su vida de primarias, secundarias. Estuvo en nivel de bachillerato, en universidades privadas y por último, al final de sus últimos años laborales, estuvo en preescolar, en el preescolar Mi Primer Colegio. Y ella siempre decía que era la lectura lo más importante. Y una de las niñas con las que empezó a trabajar muy pequeñas, fuiste tú. Uno de los primeros trabajos fue contigo.
Briseida: Conejillos de Indias.
Roberto: Exactamente, uno de los primeros conejillos de Indias. Tú aprendiste a leer cuando ya tenías 4 años, ya leías yo tengo entendido muy bien. Yo soy menor un poquito que tú, aunque no aparezca, soy menor que tú y recuerdo que yo era un pequeño y tú ya leías bastante. Cuéntanos cómo fue ese proceso de haber iniciado en esta lectura, en esta escritura desde esa edad tan temprana.
Briseida: Pues, por lo que les comento yo mismo a los padres, todo nace a partir del ejemplo. Tanto mi mamá como mi papá eran ávidos lectores. Yo recuerdo que en la casa había muchos libros y además, como tú mencionas, mi mamá era maestra de primaria. Yo estaba en preescolar y recuerdo que yo ya me quería ir a la primaria con mi mamá. Entonces, en ese tiempo yo pensaba que para poder ir a la primaria necesitaba ya saber leer y escribir. Y mi mamá pues siempre tenía libros porque como yo quería aprender, ella decía "Bueno, despacito, despacito". Me llevaba despacito, pero yo pues yo ya quería leer y entonces empezaba a preguntarle a las demás personas, si no estaba mi mamá, alguien más, "¿Qué letra es esta?" Y empezaba a trabajar con mi libro. Y sí, finalmente muy pequeña comencé a leer, muy, muy pequeña. Me acuerdo de que cuando entré a la primaria, una maestra me puso un examen, bueno, me leyó un cuento. Recuerdo muy claramente que estaba leyéndome el cuento, yo estaba distraída y todo, y cuando me empieza a hacer las preguntas pues ya no me acordaba de lo que había dicho. Y en ese momento suena el teléfono, le hablan de la dirección, y yo tomo el cuento y me pongo a leerlo y ahí estaban las respuestas. Entonces, cuando la maestra regresa, pues me empieza a preguntar nuevamente, pero yo ya me sabía todo. Entonces ya se lo dije y se sorprendió. Dije, porque cuando llegó me vio con la lectura, o sea, aquí con la, con el papel. Y entonces me preguntó "¿Ya lees?". Y yo "Sí, sí, sí leo". Y me puso a leer ahí. Y bueno, pues ella se dio cuenta de que ya leía y de hecho leía desde el preescolar. Me acuerdo mucho que estaban los avisos para los padres de familia o avisos así y yo les decía a mis compañeritos así chiquitos "Ahí dice que nuestros papás deben de venir y así", y no me creían, ¿no? Ay, pero sí, efectivamente, pues ya leía.
Roberto: He aquí la importancia de un ambiente alfabetizador. Yo también recuerdo en casa, lo que sobraba eran libros. En todas partes había libros, en las recámaras, en la sala y no libros chiquitos. Mi madre leía muchísimo, después hizo una maestría en literatura mexicana, tiene, tuvo, hizo dos carreras y siempre veías, la veías leyendo. Y sí, recuerdo que ahora entonces para ti fue un proceso natural, entiendo.
Briseida: Sí, y además lo disfrutaba mucho, o sea, a mí me encantaba leer. Recuerdo que mi premio era que me compraran libros, cuentos, íbamos a la librería y yo era feliz, o sea, así con comprando libros. Eso es lo, esos son los recuerdos que tengo.
Roberto: Y esta habilidad lectora y escritura, ¿en qué te benefició durante tu vida estudiantil? He escuchado que debemos esperar ciertas etapas, ¿no? Por ejemplo, a los 6 años para leer. Y desde la perspectiva que trabajamos en el colegio es todo lo contrario: entre más pequeños empecemos ese trabajo, más conexiones neuronales generamos, más coeficiente intelectual, como se decía anteriormente, se genera gracias a la plasticidad cerebral. ¿Realmente te llegó alguna vez a perjudicar o te ayudó en toda tu vida el haber iniciado en este proceso a esta edad?
Briseida: No, al contrario, yo creo que me benefició muchísimo porque precisamente la lectura es un lenguaje, o sea, es decodificar, es entender, no es el proceso en sí. Entonces, cuando desde pequeño ya tienes ese, esa, no sé, naturalidad para que toda esa lectura llega a ti y la comprendes, o sea, es muy diferente cuando vas leyendo sin comprender. Y cuando yo llego a la escuela, pues yo ya lo comprendía. Entonces para mí siempre fue mucho más sencillo. Yo creo que a mi mamá también le dijeron eso cuando yo era niña, que no me adelantara en la escuela porque al rato me iba a cansar, que iba a tener problemas de adaptación, que después me iban a reprobar. Y realmente nunca fue así. Yo nunca me sentí como que fuera de área o incómoda con, con mis compañeros y de hecho, siempre he ido bien en la escuela. En realidad a mí se me facilitó mucho y no solamente el español, sino también las matemáticas. Yo pienso que es un complemento. Entonces, cuando tú, es como cuando, ¿sabes qué? Es como cuando estás manejando, ¿no? Cuando estás manejando y apenas empiezas, estás ocupada en el espejo, en el freno, en los espejos laterales, ¿no? Y entonces es muy difícil pensar cuál va a ser el camino más corto para llegar porque no puedes estar pensando en tantas cosas. Entonces, primero tienes que dominar bien la técnica de manejo para que te puedas concentrar luego en el problema, que es a dónde vas a ir, cuánto por dónde te vas a ir, cuánto tiempo te va a tomar. Y lo mismo pasa con la lectura y con la escritura, o sea, si no dominas bien ese proceso, pues no te concentras en lo que dice, sino te concentras en ir juntando las palabras y conectándola sin comprenderla.
Roberto: Hace algunos, pues yo creo que ya tiene un año, dos años, leía un artículo de la Universidad Veracruzana donde dice que la mayoría de los jóvenes cuando ingresan a la universidad se busca que ya tengan un tercer nivel de lectura y también de escritura, que ahorita les voy a explicar. Y la mayoría de las jóvenes que están ingresando no lo tienen. El primer nivel que cualquier persona lectora que ya está alfabetizada debe tener es precisamente la comprensión. Yo debo comprender perfectamente cualquier texto que leo, pero con eso no basta. Viene el segundo nivel, que es una comprensión en la que yo soy capaz de todos los libros que he leído y que he comprendido, poder irlos interrelacionando. Toda la información que tienen, yo voy relacionando y vamos a hablar, no sé, sobre historia, y a lo mejor leí un libro sobre historia de México y después leí un libro sobre historia pues universal. A lo mejor he leído libros sobre política y entonces voy juntando todas las ideas que, que he absorbido de estos libros y las mezclo, no necesito volver a leerlo, sino que ya yo realicé una síntesis de toda esa información que he abstraído. Y el tercer nivel que todo joven de 18 años que quiere ingresar a la universidad tiene es que esa capacidad lectora que yo ya absorbí toda esta información me va a permitir crear o inferir nuevas ideas. Y repito, hoy vemos mucho que la mayoría de los jóvenes, hablando en secundarias, prepas, y no vas a dejar mentir porque tú has estado a nivel de secundaria, no llega ni siquiera al nivel uno, a la comprensión. Están en codificación, decodificación y muchas veces hasta silabeando, silabeando las palabras e inventando nuevas palabras. Entonces, por eso es, es la plática contigo y la invitación a los padres de familia que nos ven en este momento de por qué debemos iniciar la lectura y escritura a una edad temprana y los beneficios y que no nos genera ninguna consecuencia negativa, al contrario.
Briseida: Al contrario, así es.Bueno, es que eso te ayuda a formar un pensamiento crítico a una edad muy temprana, a, yo les digo a mis alumnos también, a expresarte, a expresarte de manera oral, de manera escrita, ¿no? Si tienes que hacer una solicitud, es que para cualquier situación que tengamos en la vida necesitamos expresarnos de manera oral, de manera escrita, necesitamos forzosamente también el pensamiento matemático. Y bueno, todo eso también es más fácil cuando lo ves desde preescolar. El conteo, nosotros tenemos ahorita muchísimos problemas en secundaria porque no tienen desarrollado ese pensamiento matemático. Y muchas veces, no sé, ellos piensan que solamente estudiando ingeniería van a utilizar las matemáticas. Y no nos damos cuenta que las matemáticas son el pan de cada día, todos utilizamos matemáticas.
Roberto: Esa es una parte muy importante que tú dices. Bueno, primero quiero dejar muy claro, tú entraste a la universidad a los 17 años, hiciste una carrera de nueve semestres y acabaste a los 21 años. Y a los 21 iniciaste tu carrera en Control, pero bueno, es una carrera, eh, una maestría en Ciencias especializada en robótica. Y la terminaste a los 23 años. Entonces, cerrando ese ciclo, nunca tuviste ningún problema porque tuvieras unos años menos que tus compañeros, al contrario, que esa, esa parte de la plasticidad cerebral te ayudó mucho, te hizo llegar a niveles de desarrollo superiores a una menor edad. ¿Correcto?
Briseida: Sí, correcto. Y fíjate que algo interesante: mi esposo, mi esposo también fue, fue mi compañero en la licenciatura y después mi compañero también en la maestría. Y yo no sabía que él también, él también ingresó muy pequeño a la, a la primaria y también ya sabía leer y escribir. E igualmente, ¿no? Él, él se ha desarrollado, él sí se ha desarrollado en el área de ingeniería y gracias a Dios es muy exitoso. Pero bueno, esto nos demuestra que no es, que es un mito el que tienes que aprender a los 6 años. Digo, yo también lo escucho de parte de algunas maestras de preescolar y pienso que bueno, ya ahora con todos los avances que hemos tenido, con lo que mencionas de la plasticidad cerebral y todas las conexiones que hacen, no solamente desde el preescolar, sino antes, desde antes. Entonces, entre más pronto empecemos, más fácil será que los niños sean exitosos. Y sabes también que no solamente ser exitoso en tu, en tu, no sé, en tu labor profesional, sino sentirte contento contigo. O sea, yo me siento capaz de resolver problemas, de tomar decisiones, y eso muchas veces adulto, muchos adultos no son capaces de realizar eso. Entonces, eso también influye y en eso influye claro que sí, la lectura, el pensamiento crítico, el pensamiento matemático.
Roberto: Aquí quiero hacer un paréntesis muy importante porque hay que dejar muy en claro que el nivel de preescolar no dice en ninguna parte que se tenga que trabajar la lectura, pero también en ninguna parte dice que no se tenga que trabajar la lectura. Al contrario, siempre nos invita el programa a que generemos un ambiente alfabetizador, a que les mostremos a los niños que la lectura, que la escritura tiene una función en la vida. Y esa es la parte importante. Sí quiero dejar muy en claro a todos los, a los que nos ven, que eso es lo que buscamos en la escuela, que de una manera constructivista, que de una manera no juego, pero sí que sea divertido para ellos, que sea que sea algo, como tú mencionabas, cuando tú, tú aprendías a leer, tú te sentías emocionada.
Briseida: Es que yo siempre pienso que leer te lleva a conocer otros mundos. Cuando, cuando tú comprendes y empiezas a leer, es tan absorbente. Empiezas, empiezas a sentirte como que lo estás viviendo y eso es algo maravilloso, o sea, la lectura es algo maravilloso, es lo que te puede llevar a otro mundo, a otro país, a otro universo sin necesidad de hacer el viaje.
Roberto: De conocer otros lugares, aunque ya no existan, porque puedes viajar al pasado.
Briseida: Exacto
Roberto: Es viajar al futuro. Y, y conocer de manera detallada cada uno de los lugares. Tengo un escritor que me gusta mucho que se llama Santiago Posteguillo y él escribe mucho sobre Roma. Y en uno de sus libros platica de que narra perfectamente los paisajes de ciertos lugares y un día un otro escritor le pregunta "Oye, bueno, qué bárbaro, qué, qué conocimiento demuestras de ese lugar. Dice, "Pues nunca he ido, ¿no?". O sea, solamente conozco lo que he leído, pero lo dominaba tanto de todas esas lecturas que después cuenta que hace ese viaje de toda la ruta del emperador Trajano y las conquistas que realizó y lo conocía mejor.
Briseida: ¡Sí!
Roberto:Que todos aquellos que habían vivido ahí, ¿no? O que lo habían ido a visitar. La lectura, estoy de acuerdo, que te abre otros mundos de manera metafórica. Recuerdo que tengo una exalumna de mi madre, mi madre le dio clases, y que todavía a los 6, 7 años me comenta su mamá que se ponía a leer y a leer y a leer y le decía "Mamá, es que yo leo, leo, leo y no viajo a otros mundos." Y le decía a su mamá "No, bueno, es que es de manera metafórica, amor, porque eso quiere decir que cuando tú lees viajas". Y ya lo entendió, ¿no? Entonces, esa parte me sigue causando hasta la fecha risa.
Briseida: Pero es que sí, o sea, yo te puedo decir, eh, yo leí el libro completo de Las Mil y Una Noches y mira, hasta la fecha, o sea, de repente digo "Eso sonó a" y así, ¿no? "A, a un pájaro y el pájaro me lo imagino". Y no sé, esa verdad es algo maravilloso, muy, muy maravilloso.
Roberto: Estoy de acuerdo. La verdad es que para cerrar este punto de la lectura, sí me da mucho gusto, sobre todo porque eres mi hermana, ver todos los beneficios que generó esa. También es una parte muy importante, tenemos que respetar las, las decisiones y los tiempos de cada uno de los pequeños. Nosotros vamos a fomentar, a buscar que detone ese interés, pero claro, nunca forzando u obligando a un niño o a una niña a aprender a leer antes de tiempo.
Briseida: Es que hay muchas técnicas que los padres pueden implementar para generar ese gusto por la lectura. Mi hermana no quería, no le gustaba la lectura, ella decía que le parecía algo aburrido, no quería leer. Y entonces mi mamá tenía siempre esas revistas de, de Selecciones y le empezaba a platicar una historia, ¿no? De esas de, de aventuras. Y entonces le empezaba a platicar y cuando estaba en lo más interesante, en la parte así, mi hermana le preguntaba "¿Y qué pasó, mamá?". Y él dice "Ah, no, ahí me quedé en la lectura, no, no lo terminé de leer". Entonces, lo que hacía lo que obligaba a mi hermana a ir a la lectura y a terminarla. Entonces, pues eso yo, todas esas, esas, eh, no sé, son técnicas que tenía mi mamá, algunas estrategias que las implementen. Es que cuando la madre o el padre les preguntan "¿Cómo te fue en la escuela?" , o si fue a algún lado, "Platícame qué hiciste". A veces, a veces eso no se hace. Desafortunadamente, a veces pasamos mucho tiempo en la televisión. Es tan común llegar y en una casa y encontrar la televisión, ¿no? Yo les digo a los padres, apaguen el, apaguen la televisión y escuchen a sus hijos, pregúntenle a sus hijos, háganlos que se expresen, que expresen sus emociones, su sentir, etcétera. Y bueno, es la, es la forma de ir fomentando las relaciones y la lectura,
Roberto: Sí. Hablando de estrategias, yo recuerdo que mi madre siempre decía, igual en mi caso, a mí me encantaban los dinosaurios y recordarás que libro que salía de los dinosaurios, revista que había de los dinosaurios, inmediatamente me la compraba, me la compraba. Así, este, ella se quedara sin dinero. Siempre buscó motivar ese interés por la lectura. A mí me gustaba leer de todo, pero hubo una época en que me encantaban los dinosaurios y yo quería saber todos los dinosaurios y me la pasaba platicando y platicando y platicando y siempre buscaba estar informándome y siempre me compró los, los libros que, que estaban a mi alcance. Y eso me ayudó muchísimo.
Briseida: Y fomentaba, o sea, porque te preguntaba. Lo que pasa es que hay veces que ya empezamos o escuchamos a un niño que está hablando y lo que hacemos es callarlo, o sea, "Ya, ya me dijiste". Y no, mi mamá era te seguía preguntando, te seguía preguntando y eso es algo muy importante, tener alguien también que te escuche.
Roberto: Lo que decias de la televisión, la televisión, queramos o no, u hoy en día el celular, es un disrtuptor, es un disruptor familiar, familiar que rompe toda la comunicación que pueda existir entre nosotros y eso también puede afectar posteriormente la confianza la autoestima porque no tengo con quién hablar y bueno tengo un caso muy cercano que por ejemplo llegamos a una casa y todo el tiempo está encendida la televisión y a un volumen muy fuerte entonces queremos por ejemplo platicar con estas personas y siempre está la televisión y estas personas atentas a la televisión así les estamos contando por ejemplo de nuestra vida y de alguna situación no dejan de ver la televisión, están como que prestándonos atención pero su atención está 100% fija a la pantalla y yo lo platico digo, Bueno la verdad es que no me dan muchas ganas de platicar de esta manera porque pues sientes que no te están haciendo caso, ¿no?
Briseida: Te sientes incómodo.Claro, no es cómodo.
Roberto: Pero desafortunadamente es, es una mala práctica que muchas personas llegamos a tener que, que se hereda, porque yo lo que considero que heredamos las tradiciones, heredamos nuestra manera de ser y vamos a generar posteriormente un problema. Sí, invitamos a todos a reducir las horas de televisión, a reducir las horas del celular, a que se platique, a que se genere esa, esa comunicación oral, esa comunicación escrita. Fomentar que los niños ya quieran mandar un mensaje "Papá, te amo, papá, te extraño". Encontrarle ese sentido al, al lenguaje escrito, ¿no?
Roberto: Bueno, y ahora pasemos a una parte importante que a ti y a mí creo que nos, nos gusta mucho, que fueron las matemáticas. ¿Cómo fue que te apoyó el, el leer desde temprano en cuestión de matemáticas? ¿Te fortaleció tu pensamiento crítico? Eso lo hemos venido oyendo. Te asumo que también te favoreció el pensamiento lógico y por ende el lógico-matemático. Cuéntanos más de las matemáticas.
Briseida: Ay, fíjate que yo realmente no me acuerdo cuándo me empezaron a... Bueno, siempre me visualicé como ingeniera, o sea, eso sí, desde niña, desde que estaba en la secundaria. Pero yo creo que tuve buenos maestros de matemáticas porque mi mamá no era del área de matemáticas, era del área de sociales y no le llamaba, no, no le gustaban las matemáticas. Pero, pero yo creo que en la secundaria tuve muy buenos maestros porque ahí me enseñaron todo lo que sé, todo lo que, todo lo que me gusta, viene de ahí. Y bueno, la lo que pasa también es que soy autodidacta, eso sí es cierto. Entonces, yo tomaba los libros y cuando no entendía algo, pues me, me remitía a ellos, me remitía a ellos y así fue como me gustaron. Había varias, varios libros que te iban llevando poco a poco y que fue con el que después estuviste trabajando tú, de la serie Schaum. Y bueno, eso ya en matemáticas avanzadas, pero desde chica pues yo creo que no tuve problemas, nunca tuve dificultades para comprender.
Roberto: Y ahora como directivo, pues tú te das cuenta que tenemos a veces un, un problema con las matemáticas, ¿no? No a todas las personas les gustan, como tú bien decías, eh, consideran que no son necesarias en buena parte de la vida, a lo mejor solamente para matemáticos, físicos, ingenieros y todas las demás profesiones no las, no las necesito usar. ¿Qué opinas acerca de este, de este tema?
Briseida: Bueno, yo te digo que estuve también en el gobierno municipal, estuve en alumbrado público y yo ahí utilizaba las matemáticas. O sea, para mí las matemáticas son básicas, ¿por qué? Pues bueno, para saber en cuestión de inventarios, cuánto cable debía tener, cuántas lámparas y todo. Pues me tenía que remitir al pasado, saber cuántos habían utilizado por mes y luego este, hacer proyecciones, utilizar estadística. Entonces, yo pienso que más bien es que nosotros nos debemos de dar cuenta dónde las tenemos que utilizar. Tan se tienen que utilizar que cuántos proyectos vemos en la calle sin concluir, ¿por qué? Porque no ha habido un cálculo, porque no ha habido una proyección de cuánto requería de dinero. Cuántos negocios también no, no salen adelante porque hicieron mal sus cuentas. Entonces, las matemáticas, yo, yo pienso que hasta en un carrito de elotes deben de utilizarse porque si no se utilizan, pues el negocio va a quebrar.
Roberto: Y desde tu posición de directora actualmente, ¿cómo ves la importancia de desarrollar desde pequeños el pensamiento lógico matemático?
Briseida: Lo creo indispensable y básico. Yo creo que es la base para tener éxito en la vida porque como te repito, o sea, no importa a lo que te dediques, necesitas matemáticas. Finanzas es matemáticas, el cómo te vas administrando, cuántos ingresos tienes, los egresos. Si no lo entiendes, si no lo comprendes. Y ah, bueno, te puedo decir que hay muchos directores que luego yo les digo cuál es la importancia para mí de las matemáticas y del pensamiento matemático y me dicen "Maestra, ¿y para qué lo quiere si ya ahí está el teléfono celular, ahí están las cuentas?". No es el hacer las cuentas, aquí lo importante es saber cómo utilizarlos para resolver un problema. Eso es lo, es lo importante del pensamiento matemático. El pensamiento matemático no es la acción de sumar, restar, multiplicar, dividir y sacar, no es eso, sino es saber interpretar el problema que tienes y resolverlo. Eso es un pensamiento matemático.
Roberto: Justo estaba leyendo hoy un artículo que varios profesores han pedido que ya no se enseñen las matemáticas, las divisiones, diversos cálculos porque ya todo es capaz de resolverlo la inteligencia artificial. Y, y también me reía porque eso no son matemáticas. Muchas veces pensamos que matemáticas es que yo cuente del uno al mil o al 10,000 o al número que sea, o que sea capaz de multiplicar, dividir, no. Las matemáticas es poder aplicar precisamente todos algoritmos, multiplicación, división, suma, resta, logaritmo, raíz cuadrada, lo que sea, aplicado a los problemas, aplicado a la vida diaria. Entonces, todo el tiempo estamos: promedios, calificaciones, ¿no? Este, ¿qué otra cosa? Porcentajes de descuentos. Vas a la tienda y hay un porcentaje de descuento, ¿cuánto cuesta? Eh, en fin, o sea, es para todo y en todo momento estamos utilizando las matemáticas. Y te repito, no es en sí la acción, sino es saber interpretar el problema y resolverlo, es eso.
Roberto: Así es, pues Briseida, te agradezco muchísimo todo el tiempo que nos has prestado, que nos has compartido tus valiosas experiencias de vida. Reconozco, te reconozco como una mujer muy exitosa, empoderada, eh, que ha alcanzado muchísimos más, muchísimas más metas, yo creo que de las que en un momento se imaginó. Me da mucho gusto verte así y saber que todo esto también partió del, del trabajo de nuestra madre, de un trabajo tuyo muy fuerte porque siempre te has esforzado en conseguir lo que, lo que quieres. También eso es algo muy importante que nuestra madre como maestra, como mamá nos enseñó a, a ser responsables, como tú decías, a ser autodidactas y a buscar siempre la mejora continua, ¿no? Te felicito y te admiro mucho.
Briseida: Ay, gracias, Roberto. Yo te admiro a ti, gracias.
En MiPrimerColegio, un Jardín de Niños de tiempo completo en Xalapa, escuchamos con mucha atención historias como la de Briseida porque confirman lo que la ciencia y nuestra experiencia nos enseñan. A menudo, hemos escuchado la idea de que "no se deben adelantar procesos", como el de la lectoescritura, por temor a dañar la autoestima o el desarrollo natural del niño.
Sin embargo, las neurociencias demuestran cada vez con más fuerza que el inicio de este proceso a edad temprana, cuando se realiza con una metodología adecuada, como la constructivista que manejamos en nuestro Preescolar, no solo no es perjudicial, sino que tiene numerosos beneficios. Fomenta una mayor plasticidad cerebral, estimula la curiosidad, mejora la comprensión y fortalece la base para el pensamiento crítico y la resolución de problemas, tal como lo experimentó Briseida. En el Mejor Preescolar no solo enseñamos a leer, sino que inspiramos el amor por el conocimiento.
La historia de Briseida nos inspira a creer en el potencial ilimitado de cada niño. Si estás buscando un Jardín de Niños de tiempo completo en Preescolar Xalapa donde se fomente el amor por el aprendizaje y se prepare a tus hijos para el futuro con metodologías innovadoras, te invitamos a conocernos.
¿Qué piensas de la experiencia de Briseida? ¿Crees que la lectura temprana es un diferenciador clave? ¡Déjanos tu opinión en los comentarios y comparte esta conversación con otros padres!
En Mi Primer Colegio, nuestro compromiso es cultivar el máximo potencial de cada niño, sentando las bases de un aprendizaje profundo y duradero. Hemos diseñado una metodología única que integra lo mejor de los enfoques educativos más innovadores, siempre respaldada por los avances de la neurociencia cognitiva.
En el corazón de nuestra propuesta educativa se encuentra el Método Filadelfia, una adaptación y estructuración para el ámbito escolar de los principios desarrollados originalmente por el renombrado neurocirujano Glenn Doman y su equipo en los Institutos para el Logro del Potencial Humano (IAHP) en Filadelfia.
El Origen y la Base Neurocientífica: A mediados del siglo XX, el Dr. Doman observó la asombrosa capacidad de recuperación y aprendizaje en niños con lesiones cerebrales cuando se les ofrecía una estimulación intensa y estructurada. Extrapoló estas observaciones a niños sanos, llegando a una conclusión revolucionaria: el cerebro de un niño pequeño posee una capacidad de absorción de información ilimitada, especialmente en los primeros seis años de vida.
Las neurociencias de hoy confirman esta premisa central. Sabemos que el cerebro infantil es extraordinariamente neuroplástico, es decir, tiene una capacidad inmensa para formar nuevas conexiones neuronales (sinapsis) en respuesta a estímulos y experiencias. Cuanto más rico, estructurado y pertinente sea el ambiente de aprendizaje, más robustas y eficientes se vuelven estas redes neuronales, construyendo la inteligencia y la arquitectura cerebral desde sus cimientos.
Basándose en estos principios neurocientíficos y en su vasta experiencia educativa, la reconocida educadora Elisa Guerra ha adaptado y estructurado el Método Filadelfia para el contexto escolar. Este método aprovecha la capacidad innata de los niños para el reconocimiento de patrones y la absorción de información de manera global, tal como lo hacen al aprender a hablar.
En Mi Primer Colegio, hemos perfeccionado una metodología que armoniza la estimulación global con la precisión fonética en la lectura, y un enfoque práctico y constructivo en las matemáticas. Todo ello, bajo el paraguas de las neurociencias y la estrategia de práctica espaciada.
La Lectura: Una Aventura que Despierta el Cerebro
Nuestra enseñanza de la lectura es una sinergia poderosa que combina enfoques probados:
Inmersión Global y el Enfoque Filadelfia: Iniciamos con mini-exposiciones a palabras completas y frases cortas, presentadas de forma rápida y entusiasta. Esto estimula el cerebro infantil para el procesamiento visual global, fomentando una lectura fluida y una conexión directa con el significado. No se trata de memorizar aisladamente, sino de que el cerebro construya redes de reconocimiento visual para el lenguaje. Las sesiones son cortas, intensas y sumamente divertidas, siempre terminando antes de que el niño muestre fatiga, cultivando así su intrínseca motivación por el aprendizaje.
Precisión con el Método Fonético: Una vez que los niños desarrollan una base sólida de reconocimiento global, integramos de forma explícita el Método Fonético. Les enseñamos las correspondencias entre los sonidos (fonemas) y las letras (grafemas). Esta combinación es crucial: les permite decodificar palabras nuevas, comprender la estructura interna del lenguaje y desarrollar una conciencia fonológica robusta, un predictor clave del éxito lector y un componente esencial para la metacognición sobre el propio proceso de lectura.
Neurociencia de la Retención: La Práctica Espaciada: Tanto en el reconocimiento global como en la fonética, aplicamos rigurosamente el principio de la práctica espaciada. Repasamos la información en intervalos estratégicos, lo que permite que el cerebro consolide lo aprendido en la memoria a largo plazo de manera más efectiva. Cada vez que el niño realiza una recuperación activa de la información con un esfuerzo óptimo, las conexiones neuronales se fortalecen y se estabilizan, asegurando un conocimiento duradero.
El resultado es un lector versátil: rápido en el reconocimiento global, preciso en la decodificación y, lo más importante, un auténtico amante de los libros y del saber.
Las Matemáticas: Construyendo el Pensamiento Lógico desde la Experiencia
En matemáticas, nuestro enfoque se diferencia de los "bits" numéricos directos de Doman, pero comparte su espíritu de estimulación temprana y respeto por el potencial cerebral, a través de una metodología basada en la experiencia y la construcción activa del conocimiento, validada por las neurociencias para el desarrollo del pensamiento lógico:
Exploración Activa y Concreta: Los niños aprenden matemáticas manipulando materiales concretos, resolviendo problemas cotidianos y participando en juegos significativos. A través de estas mini-exposiciones a situaciones reales, clasifican, cuentan, comparan y miden, construyendo sus propios esquemas mentales sobre los número y las cantidades.
Desarrollo de la Intuición Numérica: Mediante estas actividades prácticas y contextualizadas, los niños desarrollan la subitización, esa habilidad natural de reconocer instantáneamente pequeñas cantidades sin necesidad de contarlas. Esta "sensación numérica" es la base de un pensamiento matemático ágil y una sólida representación mental de la cantidad.
Comprensión Profunda y Andamiaje: Presentamos las operaciones básicas (suma, resta) no como fórmulas abstractas, sino como herramientas para resolver desafíos. Utilizamos materiales tangibles, dibujos y narrativas para que comprendan el "porqué" de cada operación, no solo el "cómo". Los docentes actúan como facilitadores, proporcionando el andamiaje pedagógico necesario para que los niños construyan su comprensión, fomentando la formulación de sus propias estrategias y la explicación de su razonamiento.
Este enfoque práctico y multisensorial en matemáticas no solo les enseña habilidades numéricas, sino que cultiva su capacidad de análisis, su razonamiento lógico y su habilidad para resolver problemas de manera creativa, habilidades transferibles y esenciales en cualquier ámbito de la vida.
La sinergia de estos enfoques educativos, enraizados en la neurociencia y adaptados con maestría, proporciona beneficios profundos y duraderos:
Potenciación del Desarrollo Neuronal: Estimulamos al máximo la neuroplasticidad cerebral, facilitando la formación de conexiones neuronales robustas que sientan una base sólida para la inteligencia y el aprendizaje futuro.
Amor Genuino por la Lectura: Al ser un proceso divertido y exitoso desde el inicio, cultivamos una pasión duradera por los libros y el conocimiento.
Comunicación Fluida y Comprensión Profunda: Desarrollan un vocabulario amplio, una comprensión lectora sólida y una capacidad de expresión clara y efectiva.
Habilidades Lógico-Matemáticas Sólidas: Adquieren una base firme en el razonamiento numérico y la resolución de problemas, esencial para el éxito académico y vital.
Creatividad e Imaginación: La exposición al conocimiento y la libertad de explorar nutren su ingenio y su capacidad de soñar sin límites.
Confianza y Autonomía: Los logros tempranos y el ambiente de apoyo construyen una autoestima robusta y la seguridad para enfrentar nuevos retos, fomentando la autorregulación en su aprendizaje.
En Mi Primer Colegio, cada día es una oportunidad para que sus hijos exploren, descubran y desarrollen todo su potencial, convirtiéndose en aprendices curiosos, capaces y felices, preparados para un futuro lleno de aprendizaje y éxito.
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Queridos padres y futuras familias de nuestra comunidad educativa,
Sabemos que la elección de la escuela de sus hijos es una decisión trascendental, llena de expectativas y el deseo de brindarles lo mejor. En Mi Primer Colegio, compartimos ese anhelo y hemos construido una filosofía educativa que, partiendo de la currícula oficial de la SEP, se enfoca en la manera en que se vive y se aprende en nuestras aulas, enriqueciendo la experiencia educativa de sus hijos.
Nuestra propuesta pedagógica se nutre del enfoque constructivista. Desde esta perspectiva, reconocemos a sus hijos como seres activos y curiosos, capaces de construir su propio conocimiento a través de la exploración, la experimentación y la interacción con su entorno. Nuestro rol como educadores es fundamentalmente el de guías activos y facilitadores, creando experiencias de aprendizaje significativas que les permitan conectar sus conocimientos previos con nuevas ideas y conceptos, al mismo tiempo que les ofrecemos una estructura clara para su desarrollo.
Además, abrazamos los principios de la psicología humanista. Esta perspectiva pone en el centro el desarrollo integral de cada niño, valorando su singularidad, su potencial y sus necesidades emocionales y sociales. Buscamos fomentar no solo su crecimiento intelectual, sino también su autoestima, su empatía y su capacidad para desarrollar relaciones positivas.
Es cierto que existen diversas metodologías educativas, algunas con un fuerte énfasis en la autonomía y la libre exploración. En Mi Primer Colegio, compartimos la valoración del constructivismo que también guía enfoques como Montessori, High Scope o Summerhill. Sin embargo, nuestra propuesta se distingue por integrar a este enfoque un marco de trabajo que consideramos esencial para la formación de individuos resilientes y responsables: un ambiente de disciplina positiva, con reglas, normas y horarios claros y consistentes.
Confiamos en que establecer horarios y responsabilidades desde temprana edad ofrece beneficios profundos y duraderos en el desarrollo de sus hijos. Estudios e investigaciones en psicología del desarrollo demuestran que la implementación de rutinas predecibles y el cumplimiento de responsabilidades adecuadas para su edad fomentan una sólida autoestima y confianza en sí mismos. Al experimentar la sensación de dominio al completar tareas, incluso pequeñas, los niños desarrollan un fuerte sentido de competencia y creen en su capacidad para alcanzar metas. Un horario regular también les brinda seguridad y un sentido de control sobre su entorno, reduciendo la ansiedad y promoviendo la estabilidad emocional. Además, asignarles responsabilidades cultiva su sentido del compromiso y la autodisciplina, habilidades fundamentales para la vida. Finalmente, estas prácticas les introducen en la gestión del tiempo y el aprendizaje de establecer y alcanzar objetivos, generando una valiosa sensación de logro. Confiamos en que establecer horarios y responsabilidades desde temprana edad no es limitar su libertad, sino ofrecerles un entorno seguro y predecible que, como hemos visto, fortalece su autoestima, fomenta la responsabilidad y les enseña habilidades cruciales para la vida.
En nuestro día a día, utilizamos la palabra "No" cuando es necesario, acompañándola siempre de una explicación razonada. Buscamos fomentar la metacognición, que los niños comprendan las razones detrás de las normas y desarrollen un pensamiento reflexivo sobre sus acciones, promoviendo así una interiorización del aprendizaje moral y social.
En coherencia con los principios de la disciplina positiva, en lugar de recurrir al castigo, nos enfocamos en las consecuencias lógicas y naturales de sus actos. Esta estrategia, basada en la idea de que toda acción tiene una reacción, ayuda a los niños a comprender la relación entre sus decisiones y los resultados que generan, fomentando la responsabilidad y el aprendizaje a través de la experiencia.
Mi Primer Colegio tiene el firme compromiso de formar adultos responsables, trabajadores, proactivos, respetuosos, tolerantes y con pensamiento crítico. Queremos que sean ciudadanos comprometidos con su comunidad y con el planeta, que valoren el esfuerzo, la creatividad y la búsqueda constante de conocimiento. Esta firme creencia en un ambiente que combina la exploración activa con una guía clara y consistente es lo que distingue nuestra propuesta educativa.
¿Es Mi Primer Colegio la adecuada para tu familia?
En Mi Primer Colegio, abrazamos una filosofía educativa que combina el constructivismo con una guía activa y presente de nuestros educadores. Creemos firmemente en la importancia de establecer horarios y responsabilidades claras para fomentar el desarrollo integral de los niños. Practicamos la disciplina positiva, enfocándonos en el aprendizaje a través de las consecuencias.
Por todo ello, invitamos a las familias que comparten nuestra convicción en la importancia de una guía activa, la estructura y la disciplina positiva, a formar parte de nuestra comunidad. Estamos seguros de que juntos podemos construir un futuro sólido para sus hijos. Estaremos encantados de compartir con ustedes cómo nuestra filosofía educativa puede ser la mejor inversión en el futuro de sus hijos.
Esperamos tener la oportunidad de construir juntos ese futuro en Mi Primer Colegio.
Atentamente
El Equipo de Mi Primer Colegio
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Como padres, no hay nada más importante que el bienestar de nuestros hijos. Los amamos profundamente y queremos darles lo mejor, protegerlos de cualquier dolor o dificultad. Sin embargo, el amor verdadero no es sinónimo de sobreprotección. El amor verdadero implica prepararlos para la vida, y eso incluye permitirles desarrollar las habilidades necesarias para ser autónomos, tomar sus propias decisiones y, sí, incluso enfrentar la frustración. De hecho, como veremos, la frustración, bien manejada, es una herramienta clave para el desarrollo de una sana inteligencia emocional.
¿Qué es la Sobreprotección (y por qué es un Problema)?
La sobreprotección es ese escudo que construimos alrededor de nuestros hijos, con la mejor intención, para evitarles cualquier incomodidad, fracaso o decepción. Se manifiesta de muchas formas:
Resolverles todos los problemas, sin darles la oportunidad de intentarlo por sí mismos.
Ceder a todos sus caprichos para evitar un berrinche.
Anticiparnos a todas sus necesidades, sin dejar que experimenten la frustración de no obtener algo de inmediato.
Evitarles cualquier tipo de riesgo o desafío.
Decidir por ellos, sin tener en cuenta sus opiniones o deseos.
A corto plazo, la sobreprotección puede parecer efectiva: evitamos lágrimas, enojos y conflictos. Pero a largo plazo, las consecuencias pueden ser muy negativas:
Baja tolerancia a la frustración: Los niños sobreprotegidos no aprenden a manejar la frustración, una emoción inevitable en la vida. Reaccionan con berrinches, llantos o agresividad ante el primer obstáculo.
Inseguridad y baja autoestima: Al no tener la oportunidad de enfrentar desafíos y superarlos por sí mismos, los niños no desarrollan la confianza en sus propias capacidades.
Dependencia: Se acostumbran a que otros resuelvan sus problemas y no desarrollan la autonomía necesaria para desenvolverse en el mundo.
Ansiedad: La falta de control sobre su propia vida y la incapacidad para manejar las emociones negativas pueden generar ansiedad.
Dificultades en las relaciones sociales: Pueden tener problemas para relacionarse con otros niños, ya que no han aprendido a compartir, a negociar o a respetar los límites.
La Frustración: Una Lección Valiosa (y Necesaria) Una Maestra Disfrazada
La frustración es una emoción natural que surge cuando no logramos lo que queremos. Aunque a nadie le gusta sentirse frustrado, es una emoción esencial para el crecimiento, es una maestra disfrazada. Aprender a tolerar la frustración es clave para:
Desarrollar la resiliencia: La capacidad de superar la adversidad y seguir adelante.
Aprender de los errores: La frustración nos impulsa a buscar nuevas soluciones y a mejorar.
Perseverar: Nos enseña a no rendirnos ante el primer obstáculo.
Regular las emociones: Aprendemos a manejar el enojo, la tristeza o la decepción de forma saludable.
Tomar decisiones: Nos ayuda a evaluar las consecuencias de nuestros actos y a elegir la mejor opción.
El Preescolar: Un Entorno Seguro para Aprender a Navegar la Frustración
Un buen preescolar, como Mi Primer Colegio, ofrece un entorno seguro y estructurado donde los niños pueden experimentar la frustración de forma controlada y aprender a manejarla. A través del juego, la interacción con otros niños y la guía de maestros capacitados, los pequeños aprenden a:
Compartir: Entender que no siempre pueden tener lo que quieren en el momento que lo quieren.
Esperar turnos: Desarrollar la paciencia y el autocontrol.
Seguir reglas: Aprender que hay límites y normas que deben respetar.
Resolver conflictos: Encontrar soluciones pacíficas a los desacuerdos con sus compañeros.
Aceptar un "no": Entender que no siempre se puede obtener lo que se desea.
Perseverar: Intentar una y otra vez hasta lograr un objetivo.
Consejos Prácticos para Padres (Manejando Berrinches de Forma Saludable y con Metacognición):
Valida la emoción: Reconoce y nombra la emoción del niño ("Veo que estás enojado porque no puedes tener ese juguete ahora mismo"). Evita frases como "No llores" o "No te enojes". Lo importante es que el niño sienta que sus emociones son legítimas.
Mantén la calma: Tu hijo necesita que seas su roca. Si tú te descontrolas, él se descontrolará más. Respira hondo y recuerda que tú eres el adulto.
Preguntas Guiadas (Enfoque en la Causa): "Veo que querías mucho ese juguete. ¿Qué te parece si pensamos juntos por qué no es posible tenerlo ahora mismo?" (Pausa para escuchar su respuesta, aunque sea un "¡Porque lo quiero!"). Luego, guiar: "Entiendo. A veces no podemos tener todo lo que queremos. ¿Recuerdas cuando [situación similar donde el niño no obtuvo algo]? ¿Cómo te sentiste entonces? ¿Qué hiciste?". El objetivo es conectar la situación con experiencias pasadas y verbalizar la causa.
Validación y Propuesta de Solución Conjunta (Enfoque en la Solución, Después de Entender la Causa): "Entiendo que estés [emoción: triste, enojado, frustrado] porque querías [objeto/situación]. Es normal sentirse así cuando no conseguimos lo que queremos. ¿Qué podemos hacer para sentirnos mejor?" (Ofrecer opciones después de la pregunta, no antes: "Podemos buscar otro juguete, leer un cuento juntos, o simplemente quedarnos aquí un ratito hasta que te sientas más tranquilo. ¿Qué tú quieres hacer?").
"Tiempo Fuera" Reflexivo (No Punitivo): "Veo que estás muy [emoción]. Vamos a tomarnos un momento para calmarnos. Puedes sentarte aquí a mi lado, o ir a tu rincón tranquilo [si tienen uno]. Cuando estés listo, podemos hablar de lo que pasó y de cómo te sientes." El tiempo fuera NO es un castigo, es un espacio seguro para que el niño se autorregule.
Validación + Pregunta Reflexiva + Alternativa Constructiva (Si Hay Agresión): "Entiendo que estés muy enojado porque [causa del enojo, si la sabes]. Pegar no está bien porque lastima. ¿Qué otra cosa podemos hacer cuando nos sentimos así de enojados? ¿Qué tal si respiramos hondo juntos? [Demostrar respiración profunda]. O, ¿qué tal si me cuentas con palabras qué pasó, para que yo te pueda entender mejor?".
Consecuencia Lógica + Reflexión: Si ya hubo agresión, establecer una consecuencia lógica y después reflexionar: "Veo que golpeaste a [persona/objeto]. Eso no está bien. Ahora, [persona] está triste/ [objeto] está roto. ¿Qué crees que podemos hacer para arreglar esto?". Después de la consecuencia (disculpa, abrazo, reparar daño), preguntar: "¿Cómo te sentiste cuando golpeaste? ¿Crees que hay otra forma de expresar tu enojo la próxima vez?".
Modelado y "Narración en Voz Alta" (Prevención): Cuando tú te sientas frustrado, verbaliza tus emociones y estrategias de afrontamiento: "Uf, estoy un poco frustrada porque se me cayó la leche. Voy a respirar hondo [respira] y voy a preparar otro. A veces pasan estas cosas".
Fomenta su autonomía: Permítele tomar pequeñas y grandes decisiones, con tu supervisión.
Celebra sus logros: No olvides felicitarle cuando tome una buena decisión, o logre realizar alguna actividad por sí mismo.
Amar a nuestros hijos no significa evitarles cualquier sufrimiento, sino darles las herramientas para que puedan enfrentar los desafíos de la vida con resiliencia, autonomía y una sana inteligencia emocional. El preescolar, y en particular un entorno como el que ofrece Mi Primer Colegio, es un aliado fundamental en este proceso, un espacio donde los niños aprenden, crecen, gestionan sus emociones y se preparan para un futuro lleno de posibilidades, un futuro donde puedan poner en práctica todas las herramientas adquiridas.
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Recuerdo que, cuando estudiaba en la preparatoria, muchos se sorprendían al saber que era una de las mejores del país. No teníamos grandes canchas ni instalaciones ultramodernas, pero sí teníamos algo invaluable: maestros apasionados y un enfoque en la excelencia académica. Hoy, como director de Mi Primer Colegio, y con la reciente entrevista con el padre de un exalumno, donde hablaba de las áreas de oportunidad de la institución, me encuentro reflexionando sobre una pregunta similar: ¿Qué es lo que realmente importa en un preescolar? Y la respuesta, aunque compleja, se basa en una verdad simple: el corazón de una escuela no se mide en metros cuadrados.
El espacio físico: honestidad y perspectiva
Seamos claros: Mi Primer Colegio no es una gran franquicia con canchas de tamaño profesional. Nuestro espacio, que originalmente fue una casa familiar, tiene un jardín y una explanada, ideales para el juego y el contacto con la naturaleza, fundamentales en esta etapa. Pero no tenemos grandes instalaciones deportivas, no lo vamos a negar.
Hemos priorizado la inversión en recursos que impactan directamente en el aprendizaje: tecnología de punta (cámaras para que los padres puedan ver las actividades, pantallas y dispositivos para los maestros), materiales didácticos y, sobre todo, la calidad de nuestro personal docente. La estética es importante, pero no a costa de la calidad educativa. Buscamos ser honestos, en cuanto a nuestro espacio, con nuestros padres de familia. Nuestro colegio puede ser pequeño, pero lo que se hace es enorme.
La Calidad Humana: El Verdadero Corazón del Colegio
Lo que realmente distingue a Mi Primer Colegio es la calidez humana, la atención personalizada y el amor que brindamos a cada niño. Creamos un ambiente seguro, acogedor y estimulante, donde cada pequeño se siente valorado y respetado. Nuestra prioridad es construir una relación cercana con cada alumno y su familia, trabajando juntos para potenciar su desarrollo integral.
Excelencia Educativa: Resultados Comprobados
Nuestra propuesta educativa se basa en metodologías innovadoras y comprobadas, como el Método Filadelfia para la lectoescritura temprana y el Total Physical Response (TPR) para el aprendizaje del inglés. Estas herramientas, combinadas con un enfoque en el pensamiento lógico-matemático y el desarrollo de habilidades socioemocionales, preparan a nuestros alumnos para el éxito en la primaria y más allá.
Pero no nos quedamos solo en lo académico. Formamos pequeños con valores, que aman aprender, que son responsables, autónomos y conscientes de que el esfuerzo tiene su recompensa. Y los resultados hablan por sí solos: nuestros exalumnos destacan en los niveles superiores no solo por sus conocimientos, sino también por su calidad humana.
Invitación a Valorar lo Esencial
En Mi Primer Colegio, creemos que el verdadero valor de un preescolar reside en la calidad de las experiencias que ofrece a los niños, en el amor y la dedicación de sus maestros, y en el compromiso con el desarrollo de su potencial. Los invitamos a conocernos y a descubrir por qué, para nosotros, el tamaño no importa cuando se trata de construir un futuro brillante para nuestros pequeños. Porque nuestro colegio es pequeño, pero lo que aquí hacemos, es enorme.
A veces, de adultos, miramos atrás y pensamos: "¡Ojalá hubiera aprovechado más esta o aquella oportunidad!". Y, ¿saben qué? ¡El kinder es ESA oportunidad en la vida de nuestros peques! ✨
No se trata solo de aprender el ABC y los números (¡aunque eso también es importante!). En el kinder, los niños desarrollan habilidades sociales que les servirán para toda la vida: aprenden a compartir, a colaborar, a resolver conflictos, a expresar sus emociones... ¡a ser parte de un grupo! 🤝
Pero la cosa no se queda ahí. Estudios demuestran que el kinder sienta las bases para el éxito académico futuro. Los niños que asisten al preescolar tienen un mejor desempeño en lectura, escritura y matemáticas en la primaria. ¡Es como construir una casa sólida desde los cimientos! 🧱
Y hablando de construir... ¡yo sigo practicando mi recortado! ✂️ (Confieso que, por faltar a alguna que otra clase de kinder, ¡todavía se me va la tijera! 😜). Pero en serio, más allá de la anécdota, el kinder es ese espacio mágico donde los niños descubren el mundo, aprenden jugando y se preparan para un futuro brillante. 🚀
¡No dejes pasar esta etapa crucial! 😉 #KinderObligatorio #FuturoBrillante #Educación #Niños #Preescolar #InscripcionesAbiertas #HabilidadesSociales #DesarrolloInfantil #AprendizajeDivertido #ConfesionesDeUnAdulto
Como padres, la educación de sus hijos es, sin duda, su mayor prioridad. En la búsqueda de la mejor opción para su desarrollo y bienestar, es natural cuestionarse y comparar. La educación preescolar, a menudo percibida como una simple etapa de juego, es en realidad un periodo crítico donde se construyen los cimientos del aprendizaje futuro, y en particular, del desarrollo de la lectoescritura. Este artículo explora la importancia del preescolar como un espacio para el florecimiento del potencial humano, basándose en la evidencia científica y en un enfoque pedagógico integral.
Nuestro enfoque: el potencial humano como prioridad
Cada niño es un universo de posibilidades. La educación preescolar de calidad se fundamenta en el respeto por los ritmos individuales de aprendizaje y en el desarrollo integral del estudiante. No se limita a impartir conocimientos, sino que cultiva habilidades, valores y actitudes, permitiendo a los niños construir su propio camino hacia el éxito. Se integra un modelo pedagógico ecléctico y globalizador, que se adapta a las necesidades específicas de cada alumno, conectando los diferentes campos formativos y promoviendo el desarrollo de habilidades cognitivas, socioemocionales y psicomotrices.
Método Filadelfia y neurociencias: un fundamento científico
La base de una pedagogía efectiva en preescolar, como la implementada en el Colegio Carlos Rodríguez, puede incluir metodologías como el Método Filadelfia, desarrollado por el médico Glenn Doman (2005). Este método se enfoca en la estimulación temprana del cerebro, aprovechando la plasticidad cerebral, es decir, la capacidad del cerebro, mayor en los primeros años, para crear nuevas conexiones neuronales a partir de la experiencia.
Las neurociencias han demostrado que la exposición a un ambiente rico en estímulos lingüísticos y experiencias de aprendizaje significativas durante la primera infancia tiene un impacto profundo en la arquitectura cerebral. Fortalece las redes neuronales asociadas con el lenguaje, la atención, la memoria y el razonamiento (Diamond & Hopson, 1998), habilidades fundamentales para la lectoescritura.
La lectoescritura temprana: prevención y oportunidad
La lectoescritura, más que una habilidad académica, es una herramienta fundamental para el desarrollo cognitivo y la participación social. Investigaciones, como la de Vega García (2024) en la Universidad Veracruzana, identifican un atraso en el aprendizaje de la lectoescritura en la primaria, vinculado a factores familiares, personales y escolares. Esto subraya la importancia de una intervención temprana. El preescolar se convierte, así, en un espacio crucial para prevenir futuras dificultades, estimulando el lenguaje oral y escrito, y sentando las bases para una sólida comprensión lectora, un vocabulario amplio y una expresión fluida.
Un enfoque integral: más allá de lo académico
Un preescolar de calidad trasciende la enseñanza tradicional. Ofrece experiencias que integran, de forma transversal:
Lenguaje y comunicación: Estimulación de la comunicación oral y escrita, la creatividad y la expresión a través del juego, el arte y la interacción social.
Pensamiento lógico-matemático: Desarrollo del razonamiento, la resolución de problemas y la curiosidad, mediante juegos y experiencias concretas.
Desarrollo socioemocional: Fomento de la empatía, el respeto, la autonomía, la responsabilidad y las habilidades sociales, a través de la convivencia y actividades que permitan la libre expresión.
Valores, habilidades y atención personalizada: los pilares de una formación integral
Un buen preescolar, comoMi Primer Colegio, no solo se enfoca en conocimientos académicos. Inculca valores como el respeto, la disciplina, la cooperación y la honestidad. Se busca desarrollar habilidades clave para el siglo XXI: pensamiento crítico, creatividad, comunicación y adaptabilidad.
Reconociendo la individualidad de cada niño, se ofrece una atención personalizada. Los grupos reducidos y la observación constante del desarrollo individual permiten a los educadores identificar fortalezas y áreas de oportunidad, brindando el apoyo necesario para que cada niño alcance su máximo potencial.
La educación preescolar es una inversión en el futuro. Un preescolar de calidad, fundamentado en un enfoque humanista, en la evidencia científica y en el respeto por la individualidad, como el que ofrece Mi Primer Colegio, es el mejor regalo para las nuevas generaciones. Es el espacio donde se siembran las semillas del conocimiento, los valores y las habilidades que permitirán a los niños florecer y construir un futuro brillante.
¿Sabías que los primeros años de vida son la oportunidad de oro para moldear el futuro de tu hijo? No, no estamos hablando de convertirlo en un mini-Einstein a los 3 años. Estamos hablando de algo mucho más poderoso: desatar su potencial innato.
Piensa en el cerebro de tu hijo como un jardín. Al nacer, tiene millones de semillas (neuronas) listas para germinar. Pero esas semillas necesitan el ambiente adecuado: estímulos, experiencias, interacciones y, sobre todo, amor. Y ahí es donde un preescolar de calidad, como el Colegio Carlos Rodríguez, marca la diferencia.
No es Magia, es Neurociencia: El Poder de la Plasticidad Cerebral
Olvídate de las ideas anticuadas sobre el preescolar como un simple "lugar para jugar". Hoy, la neurociencia nos revela que estos primeros años son críticos para la plasticidad cerebral, esa capacidad asombrosa que tiene el cerebro para cambiar, adaptarse y crear nuevas conexiones neuronales (sinapsis) a una velocidad impresionante.
Cada vez que tu hijo...
Escucha un cuento...
Arma un rompecabezas...
Canta una canción...
Clasifica objetos por colores...
Interactúa con sus compañeros...
...está, literalmente, construyendo su cerebro. Está fortaleciendo las conexiones neuronales que le permitirán leer, escribir, resolver problemas, ser creativo, regular sus emociones y, en definitiva, alcanzar su máximo potencial.
Mi Primer Colegio: Libera el Potencial Humano
En Mi Primer Colegio, no nos conformamos con "entretener" a los niños. Somos arquitectos de experiencias diseñadas para nutrir cada área del desarrollo infantil:
Lectoescritura Temprana: No esperamos a la primaria. Implementamos estrategias innovadoras, basadas en la investigación de José Iván Vega García, para sembrar el amor por las letras y las palabras desde el principio.
Matemáticas para la Vida: Transformamos los números en un juego emocionante, desarrollando el pensamiento lógico, la resolución de problemas y la capacidad de análisis.
Inglés a través del Movimiento: Con el método Total Physical Response (TPR), los niños aprenden inglés de forma natural y divertida, ¡como si fuera un juego!
El Arte como Lenguaje Universal: Música, pintura, teatro... Despertamos la creatividad, la expresión y la sensibilidad de cada niño.
Alimentación Consciente: Porque un cerebro bien nutrido es un cerebro listo para aprender.
Más que un Colegio, una Comunidad:
Sabemos que el desarrollo de un niño no se limita al aula. Por eso, en Mi Primer Colegio, fomentamos una estrecha colaboración con las familias, creando una comunidad de apoyo donde padres y educadores trabajamos juntos para potenciar el crecimiento de cada pequeño.
¿Estás listo para darle a tu hijo el mejor comienzo?
¡Inscripciones abiertas!
La terapia del lenguaje es un campo fascinante y complejo que se encarga de evaluar, diagnosticar y tratar los trastornos de la comunicación en personas de todas las edades. Para los terapeutas del lenguaje, cada paciente representa un reto único que requiere un enfoque individualizado y basado en la evidencia científica. A continuación, se presenta una guía completa con consejos, recursos y estrategias para enriquecer la práctica profesional de la terapia del lenguaje:
1. Evaluación integral y precisa:
Historial clínico detallado: recabar información exhaustiva sobre el desarrollo del paciente, antecedentes médicos, familiares y educativos.
Observación directa: observar al paciente en diferentes contextos (juego, interacción con familiares, actividades estructuradas) para evaluar su comunicación espontánea.
Pruebas estandarizadas: utilizar pruebas estandarizadas y validadas científicamente para evaluar las diferentes áreas del lenguaje (fonología, morfosintaxis, semántica, pragmática) y compararlo con su grupo normativo. Ejemplos:
Evaluación fonológica:
TEPROSIF-R: test para Evaluar Procesos de Simplificación Fonológica - Revisado.
Evaluación fonológica de Laura Bosch.
Morfosintaxis:
TSA: test de Sintaxis de Aguado.
CEG: test de Comprensión de Estructuras Gramaticales.
Semántica:
Peabody: test de Vocabulario en Imágenes Peabody.
BOEHM: test de Conceptos Básicos.
Pragmática:
Batería de Lenguaje Objetiva y Criterial (BLOC).
Protocolo de Pragmática de Prutting y Kirchner.
Análisis del habla y lenguaje: grabar muestras de habla y lenguaje espontáneo para analizar la fonética, fonología, morfosintaxis, semántica y pragmática del paciente.
Evaluación de habilidades relacionadas: considerar la evaluación de habilidades cognitivas, auditivas, motoras y socioemocionales que pueden estar afectando el lenguaje.
2. Planificación de la intervención:
Objetivos claros y medibles: establecer objetivos de intervención específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con un tiempo determinado (SMART).
Enfoque centrado en el paciente y su familia: considerar las necesidades, intereses y prioridades del paciente y su familia al planificar la intervención.
Jerarquización de objetivos: comenzar por los objetivos más prioritarios y avanzar gradualmente hacia los más complejos.
Selección de estrategias y materiales: elegir las estrategias y materiales más adecuados para cada paciente y cada objetivo, basándose en la evidencia científica y las mejores prácticas.
3. Estrategias de intervención:
Modelado: el terapeuta proporciona un modelo correcto del lenguaje que se está trabajando.
Expansión: el terapeuta reformula el enunciado del paciente, añadiendo elementos gramaticales o semánticos.
Recast: el terapeuta reformula el enunciado del paciente, corrigiendo errores de forma indirecta.
Imitación: se anima al paciente a imitar modelos de lenguaje proporcionados por el terapeuta.
Juego estructurado: se utilizan juegos y actividades lúdicas para trabajar los objetivos de lenguaje de forma motivadora.
Uso de apoyos visuales: imágenes, pictogramas, gestos y otros apoyos visuales pueden facilitar la comprensión y producción del lenguaje.
Tecnología asistiva: utilizar aplicaciones, software y dispositivos tecnológicos diseñados para apoyar la terapia del lenguaje.
4. Recursos para la terapia del lenguaje:
Videos:
Canal "Logopedia Creativa": ofrece ideas y recursos para la intervención en logopedia.
Cómo encontrarlo: buscar en YouTube "Logopedia Creativa".
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Canal "Comunicación y Lenguaje PT y AL": comparte estrategias y actividades para trabajar diferentes aspectos del lenguaje.
Cómo encontrarlo: buscar en YouTube "Comunicación y Lenguaje PT y AL".
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Canal "Aula PT": ofrece ideas y recursos para la intervención en dificultades de aprendizaje y lenguaje.
Cómo encontrarlo: buscar en YouTube "Aula PT".
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Recursos para imprimir:
ARASAAC: portal Aragonés de la Comunicación Aumentativa y Alternativa. Ofrece una gran cantidad de pictogramas, materiales y recursos para la comunicación y el lenguaje.
Enlace: https://arasaac.org/
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Orientación Andújar: blog con una gran variedad de recursos para la intervención en dificultades de aprendizaje y lenguaje.
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Actividades de Lenguaje y Comunicación: blog con una amplia gama de actividades para trabajar el lenguaje oral y escrito.
Cómo encontrarlo: buscar en Google "Blog Actividades de Lenguaje y Comunicación" o "Rincón de una maestra, actividades de lenguaje y comunicación"
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Recursos de Logopedia, de la editorial CEPE: contiene materiales, libros y test sobre la intervención logopédica.
Enlace: https://www.editorialcepe.es/
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5. Evaluación continua y ajustes:
Monitoreo del progreso: evaluar de forma regular el progreso del paciente hacia los objetivos planteados.
Flexibilidad: ajustar el plan de intervención según las necesidades y el progreso del paciente.
Retroalimentación a la familia: mantener una comunicación fluida con la familia para informarles sobre los avances del paciente y proporcionarles estrategias para apoyar el desarrollo del lenguaje en casa.
6. Formación continua:
Mantenerse actualizado: la terapia del lenguaje es un campo en constante evolución. Es fundamental que los terapeutas se mantengan actualizados sobre las últimas investigaciones, metodologías y recursos a través de cursos, congresos, revistas especializadas y formación online.
Supervisión clínica: participar en supervisiones clínicas con profesionales experimentados para recibir retroalimentación y mejorar las habilidades terapéuticas.
Trabajo en equipo: colaborar con otros profesionales (psicólogos, pedagogos, terapeutas ocupacionales, etc.) para ofrecer una atención integral al paciente.
7. Ética profesional:
Confidencialidad: mantener la confidencialidad de la información del paciente y su familia.
Consentimiento informado: obtener el consentimiento informado del paciente o su representante legal antes de iniciar la evaluación y el tratamiento.
Práctica basada en la evidencia: basar las decisiones terapéuticas en la evidencia científica disponible y las mejores prácticas.
Derivación: saber cuándo derivar a otro profesional si el caso excede las propias competencias.
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Los primeros años de vida son una etapa crucial para el desarrollo del lenguaje oral, esa maravillosa capacidad que nos permite comunicarnos, expresar nuestras ideas y comprender el mundo que nos rodea. En este periodo, el cerebro de los niños es como una esponja, absorbiendo ávidamente los sonidos, las palabras y las estructuras del lenguaje que escuchan a su alrededor. Como padres, cuidadores y educadores, tenemos un papel fundamental en nutrir este proceso, creando un ambiente rico en estímulos lingüísticos que ayude a los pequeños a florecer como hablantes competentes y seguros. En el Colegio Carlos Rodríguez, estamos comprometidos con el desarrollo integral de los niños y la lectoescritura, y creamos un ambiente ideal para el desarrollo de su lenguaje.
¿Cómo se desarrolla el lenguaje oral?
El desarrollo del lenguaje es un proceso complejo que comienza incluso antes del nacimiento, cuando el feto empieza a familiarizarse con la voz de su madre en el útero. Después del nacimiento, los bebés pasan por varias etapas:
0-6 meses: Los bebés se comunican a través del llanto, los balbuceos y los gorjeos. Comienzan a experimentar con los sonidos y a prestar atención a las voces de las personas que los rodean.
6-12 meses: El balbuceo se vuelve más complejo, con sílabas repetitivas como "ba-ba" o "da-da". Empiezan a comprender algunas palabras sencillas, como "no" o su propio nombre.
12-18 meses: Pronuncian sus primeras palabras con significado. Su vocabulario se expande lentamente.
18-24 meses: Comienzan a unir dos palabras para formar frases simples, como "más agua" o "papá pelota".
2-3 años: Su vocabulario crece rápidamente. Forman oraciones más largas y complejas. Empiezan a usar pronombres, preposiciones y tiempos verbales simples.
3-4 años: Pueden mantener conversaciones sencillas y contar historias cortas. Su pronunciación mejora notablemente.
4-5 años: Su lenguaje se vuelve más sofisticado. Utilizan oraciones complejas, hacen preguntas y participan activamente en conversaciones.
5-6 años: Dominan las estructuras gramaticales básicas de su lengua materna. Su vocabulario es amplio y su pronunciación es clara.
Estrategias para estimular el desarrollo del lenguaje oral:
Hablarle Constante y Claramente: Desde el nacimiento, háblale a tu hijo con frecuencia, utilizando un lenguaje claro y sencillo. Describe lo que estás haciendo, nombra los objetos que te rodean, canta canciones y rimas infantiles. Incluso si el niño no te responde con palabras, está procesando la información y asimilando los sonidos del lenguaje.
Escucha Activa: Presta atención a los intentos de comunicación de tu hijo, ya sean balbuceos, gestos o palabras. Responde a sus intentos de forma verbal y no verbal, mostrándole que te interesa lo que tiene que decir.
Lectura de Cuentos: Leer cuentos a los niños es una de las mejores formas de estimular el desarrollo del lenguaje. Elige libros con ilustraciones llamativas y un lenguaje adecuado a su edad. Haz preguntas sobre la historia, anima a tu hijo a predecir lo que va a pasar o a describir las imágenes.
Juego Simbólico: El juego simbólico, donde los niños representan roles e inventan historias, es fundamental para el desarrollo del lenguaje. Proporciónale a tu hijo juguetes que fomenten este tipo de juego, como muñecos, disfraces o bloques de construcción.
Cantar Canciones y Recitar Rimas: Las canciones y las rimas infantiles son una excelente forma de familiarizar a los niños con los sonidos del lenguaje, el ritmo y la entonación.
Limitar el Tiempo de Pantalla: La exposición excesiva a pantallas (televisión, tabletas, teléfonos móviles) puede interferir con el desarrollo del lenguaje. Es importante limitar el tiempo que los niños pasan frente a las pantallas y priorizar la interacción cara a cara. La Academia Americana de Pediatría recomienda evitar las pantallas en menores de 18 meses, salvo videollamadas, y un máximo de 1 hora para niños de 2 a 5 años, siempre con contenido de calidad y supervisión de un adulto.
Ser un Buen Modelo: Los niños aprenden por imitación. Utiliza un lenguaje correcto y variado, y evita el uso de palabras inadecuadas.
Crear un ambiente de apoyo: Evitar las críticas, o comparaciones, y celebrar los logros.
Señales de Alerta:
Si te preocupa el desarrollo del lenguaje de tu hijo, es importante consultar con un profesional. Algunas señales de alerta que pueden indicar la necesidad de una evaluación son:
No balbucea a los 12 meses.
No dice ninguna palabra a los 18 meses.
No une dos palabras a los 2 años.
No sigue instrucciones sencillas a los 3 años.
Su lenguaje es difícil de entender a los 4 años.
Tartamudea o tiene dificultades para pronunciar ciertos sonidos después de los 5 años.
Recuerda que cada niño se desarrolla a su propio ritmo, pero es fundamental estar atentos a las señales de alerta y buscar ayuda profesional si es necesario. Un diagnóstico temprano y una intervención adecuada pueden marcar una gran diferencia en el desarrollo del lenguaje de un niño.
El lenguaje es una herramienta poderosa que abre las puertas al conocimiento, la comunicación y la interacción social. Al favorecer el desarrollo del lenguaje oral en los primeros años de vida, estamos sentando las bases para un futuro lleno de posibilidades.
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El termómetro marca 7 grados en Xalapa, y la ciudad tiembla. Con el frío, llegan también las preocupaciones por las enfermedades respiratorias. Pero, ¿sabías que el frío en sí mismo no es el culpable de que caigamos enfermos? La realidad es mucho más interesante y nos da el poder de tomar el control de nuestra salud. Vamos a desmitificar algunas creencias y a descubrir cómo construir un verdadero escudo anti-enfermedades, enfocándonos en lo que sí podemos controlar: nuestra alimentación, nuestros hábitos y, sobre todo, la fortaleza de nuestro sistema inmune.
El Mito del Frío Malvado: Los Verdaderos Culpables
Es común escuchar que "el frío enferma", pero la ciencia nos dice otra cosa. Son los virus y bacterias los verdaderos responsables de las infecciones respiratorias. Lo que sí hace el frío es crear un ambiente más propicio para que estos microorganismos se propaguen y nos afecten. Por ejemplo, el aire frío puede resecar las fosas nasales, lo que debilita uno de nuestros primeros mecanismos de defensa: los cilios, la mucosa, y otros componentes de la nariz, que actúan como un filtro natural, atrapando virus y bacterias antes de que lleguen a nuestros pulmones. Además, el frío hace que los vasos sanguíneos se contraigan, lo que reduce el flujo de células inmunitarias en las vías respiratorias. Sin embargo, el frío, por sí mismo, no causa la enfermedad.
El Cubrebocas: Un Aliado Subestimado
Si bien el frío disminuye la eficiencia del sistema de filtrado nasal, el uso correcto del cubrebocas puede ayudar a reducir la entrada de virus y bacterias. Este efecto protector se maximiza si todos en la comunidad lo utilizan. Al usar cubrebocas, no sólo te proteges a tí, sino también a los que te rodean. En entornos fríos, el cubrebocas puede actuar como una barrera física adicional, manteniendo la humedad y el calor en las vías respiratorias, lo que ayuda a que el sistema de filtro nasal funcione mejor.
La Clave: Un Sistema Inmune de Acero
La clave para evitar las enfermedades respiratorias, entonces, no es solo abrigarse, sino fortalecer nuestro sistema inmune, ese ejército interno que nos defiende de los invasores microscópicos. Un sistema inmune fuerte puede neutralizar los virus y bacterias antes de que nos causen daño, o al menos reducir la severidad y duración de la enfermedad.
Alimentación: El Combustible de tus Defensas
Lo que comemos tiene un impacto directo en la capacidad de nuestro cuerpo para defenderse. Una dieta equilibrada y rica en nutrientes es el combustible que nuestro sistema inmune necesita para funcionar a la perfección. Aquí algunos nutrientes clave:
Vitamina C: Un poderoso antioxidante que estimula la producción de glóbulos blancos, las células encargadas de combatir las infecciones. La encontramos en cítricos (naranjas, limones, mandarinas), fresas, kiwis, pimientos y brócoli. Un estudio publicado en la revista "Nutrients" en 2017 concluyó que la suplementación con vitamina C puede reducir la duración y la severidad del resfriado común.
Vitamina D: Juega un papel crucial en la modulación de la respuesta inmune. La principal fuente es la exposición solar (con precaución), pero también se encuentra en pescados grasos (salmón, atún), yema de huevo y alimentos fortificados. Un estudio en la revista "Archives of Internal Medicine" encontró una asociación entre niveles bajos de vitamina D y un mayor riesgo de infecciones respiratorias.
Zinc: Este mineral es esencial para el desarrollo y la función de las células inmunitarias. Se encuentra en carnes rojas, mariscos (especialmente ostras), legumbres, frutos secos y semillas. Un metaanálisis publicado en "The Cochrane Database of Systematic Reviews" en 2013 encontró que el zinc puede reducir la duración del resfriado común si se toma dentro de las 24 horas posteriores al inicio de los síntomas.
Magnesio: Participa en cientos de reacciones bioquímicas en el cuerpo, incluyendo la función inmunológica. Lo encontramos en vegetales de hoja verde, frutos secos, semillas, legumbres y cereales integrales.
Proteínas: Son fundamentales para la producción de anticuerpos, las proteínas que identifican y neutralizan a los patógenos. Consume carnes magras, pescado, huevos, lácteos, legumbres y tofu.
Probióticos: Estas bacterias beneficiosas que habitan en nuestro intestino no solo mejoran la digestión, sino que también fortalecen el sistema inmune. Los encontramos en el yogur, el kéfir y otros alimentos fermentados.
Hábitos que Refuerzan tu Escudo:
Además de una buena alimentación, hay otros hábitos que contribuyen a un sistema inmune fuerte:
Dormir bien: Durante el sueño, el cuerpo produce y libera citocinas, proteínas que combaten la inflamación y las infecciones. Se recomiendan entre 7 y 8 horas de sueño para adultos, y más para los niños.
Manejar el estrés: El estrés crónico debilita el sistema inmune. Practicar técnicas de relajación como la meditación, el yoga o simplemente respirar profundamente puede ayudar.
Hacer ejercicio regularmente: La actividad física moderada, como caminar, nadar o andar en bicicleta, mejora la circulación y ayuda a que las células inmunitarias se muevan por el cuerpo de manera más eficiente.
Lavarse las manos: Una medida simple pero fundamental para prevenir el contagio de virus y bacterias.
Conclusión: Toma el Control de tu Salud
No podemos controlar el clima, pero sí podemos fortalecer nuestras defensas. Una alimentación rica en nutrientes, combinada con hábitos saludables y el uso de cubrebocas, es la mejor estrategia para decirle adiós a los resfriados y disfrutar del invierno al máximo. Recuerda que tu salud está en tus manos. ¡Fortalece tu sistema inmune y construye un escudo anti-enfermedades!
¿Quieres que tu hijo sea un crack de las matemáticas? ¿Un genio del futuro? La clave no está en llenarlo de tareas y números a una edad en la que debe jugar, sino en despertar la chispa de la curiosidad matemática en el lugar correcto: Mi Primer Colegio. Sí, leíste bien. Esa etapa que muchos ven como solo juegos y canciones es, en realidad, el semillero de las mentes brillantes del mañana. Y no se trata de magia, se trata de neurociencia, plasticidad cerebral y una inversión inteligente en educación de calidad.
Olvida la idea de que las matemáticas son aburridas o solo para "elegidos". Todos los niños nacen con un potencial matemático increíble, una semilla que espera ser regada con las experiencias adecuadas. Y aquí es donde, en el Colegio Carlos Rodríguez, hacemos la diferencia. No se trata de cualquier "guardería", estamos hablando de un espacio diseñado por profesionales de la educación donde cada juego, cada actividad, cada rincón está pensado para estimular el pensamiento lógico, la resolución de problemas y el amor por los números.
¿Cómo lo hacemos en Mi Primer Colegio?
Con juegos de construcción que desafían a los peques a pensar en formas, tamaños y equilibrio, sentando las bases de la geometría.
Con actividades de clasificación y seriación que les enseñan a organizar la información, un pilar fundamental del razonamiento matemático.
Con canciones y rimas que introducen el conteo y los patrones de forma divertida y memorable.
Con la resolución de problemas cotidianos, adaptados a su edad, que les enseñan a pensar de forma estratégica y creativa.
Con el uso de materiales concretos como bloques, fichas y ábacos, para que puedan "tocar" las matemáticas y comprenderlas mejor, usando su cuerpo y su experiencia sensorial.
Con el fomento a la lectura, tal y como lo sugirió el Licenciado en Pedagogía, José Iván Vega García, en su investigación, la comprensión lectora es fundamental para el desarrollo de problemas matemáticos. En nuestro colegio, implementamos la estimulación a la lectura como base del aprendizaje integral.
La ciencia lo confirma:
La neuroplasticidad, esa capacidad mágica del cerebro para adaptarse y crear nuevas conexiones, está en su máximo esplendor durante los primeros años de vida. Cada experiencia matemática en Mi Primer Colegio deja una huella, moldeando el cerebro de tu hijo y preparándolo para el éxito futuro. No solo en matemáticas, sino en todas las áreas del conocimiento, porque un cerebro matemáticamente estimulado es un cerebro ágil, crítico y creativo.
Invertir en Mi Primer Colegio es apostar por el capital intelectual de tu hijo. Es asegurar su futuro, su capacidad de innovar, de resolver problemas complejos y de descifrar el código del mundo que le rodea. No se trata solo de que le vaya bien en la escuela, sino de que tenga las herramientas para triunfar en la vida, que sea un ciudadano que se interese por su entorno y busque mejorarlo.
Palabras clave para el futuro:
Neuroplasticidad: El cerebro de tu hijo es moldeable, ¡aprovecha esta etapa!
Pensamiento lógico: La base no solo de las matemáticas, sino de cualquier disciplina.
Resolución de problemas: Una habilidad esencial para la vida.
Curiosidad: El motor del aprendizaje.
Inversión: El Colegio Carlos Rodríguez es la mejor inversión que puedes hacer.
Lectoescritura: La base de todo aprendizaje, como lo demostró la investigación de José Iván Vega García.
No dejes al azar el desarrollo del potencial matemático de tu hijo. Elige Mi Primer Colegio, donde encendemos la chispa del genio que lleva dentro.
¡Ya vienen las preinscripciones para preescolar! Del 3 al 14 de febrero es tu oportunidad para darle a tu peque el mejor comienzo en su vida escolar. Y ojo, que si tu hijo cumple 3 años antes del 31 de diciembre de este año, ya le toca entrar a 1º; si cumple 4, va para 2º, y si cumple 5, a 3º de preescolar. Ahora, mucha atención, porque esto es importante: el preescolar de hoy no es la "guardería" de antes, ni se trata solo de colorear dibujitos.
Olvídate de esa idea anticuada. El preescolar actual es, como diría el gran pedagogo italiano Francesco Tonucci, un verdadero "jardín de niños", un lugar donde se cultiva con amor y cuidado el potencial de cada pequeño. No es solo un lugar donde se "guardan" mientras los papás trabajan; es un espacio donde se nutre a personitas en formación, donde se siembran las semillas de los valores, habilidades, actitudes y conocimientos que los acompañarán toda su vida.
¿Por qué es tan crucial el preescolar? Aquí entra la ciencia... y las neuronas.
Resulta que el cerebro de los niños, especialmente en sus primeros años, es como una esponjita, absorbiendo todo a su alrededor. Gracias a las neurociencias, ahora sabemos que durante la etapa preescolar, el cerebro está en pleno desarrollo, creando conexiones neuronales a una velocidad impresionante. Es como si se estuvieran construyendo las autopistas por donde va a viajar toda la información que recibirán en el futuro.
¿Y qué pasa en el preescolar que no pasa en casa?
En el preescolar, los niños se enfrentan a experiencias diseñadas específicamente para estimular su desarrollo integral. A través del juego, la socialización y actividades guiadas por profesionales, se activan áreas del cerebro relacionadas con:
El lenguaje: Aprenden nuevas palabras, a estructurar oraciones, a comprender historias. Esto es clave para la lectoescritura, como bien demostró el estudio de José Iván Vega García que ya les platicamos.
El pensamiento lógico-matemático: Empiezan a entender conceptos como números, formas, tamaños, a través de juegos y actividades que parecen simples, pero que en realidad están sentando las bases para el razonamiento matemático.
La motricidad fina y gruesa: Coordinan sus movimientos, aprenden a usar sus manitas con precisión (¡adiós a los rayones fuera de la línea!) y a controlar su cuerpo en el espacio.
La creatividad y la imaginación: Se expresan a través del arte, la música, el juego simbólico, inventando historias y creando mundos fantásticos.
Las habilidades sociales y emocionales: Aprenden a convivir con otros niños, a compartir, a resolver conflictos, a regular sus emociones. Esto es fundamental para su bienestar y su éxito en la vida.
En resumen, el preescolar no es solo "cosa de niños". Es una etapa crucial en la que se forma el cimiento para todo el aprendizaje futuro. Se estimulan las habilidades cognitivas y ayuda a los niños a crecer felices. No es pintar y pegar, es crear ciudadanos. Y el preescolar de hoy toma en cuenta todo esto para ofrecer a los niños el mejor entorno posible para su crecimiento. No se trata de una serie de actividades aisladas. Es, como bien dice Tonucci, un trabajo de jardinería humana, donde cada niño es una planta única que necesita ser nutrida con cuidado y atención para florecer en todo su esplendor.
Así que ya lo sabes, las preinscripciones están a la vuelta de la esquina. Dale a tu hijo la oportunidad de crecer en un verdadero "jardín de niños". ¡No te arrepentirás!
Recuerda:
Preinscripciones: Del 3 al 14 de febrero.
3 años cumplidos al 31 de diciembre: 1º de preescolar.
4 años cumplidos al 31 de diciembre: 2º de preescolar.
5 años cumplidos al 31 de diciembre: 3º de preescolar.
Recuerda que en el Jardín de niños Mi Primer Colegio integramos un modelo educativo ecléctico, para potencias todas la habilidades y conocimientos de sus hijos.
Si bien no existe una "dieta para el autismo" que cure o elimine los síntomas, una alimentación adecuada puede influir positivamente en el bienestar general y ayudar a manejar algunas dificultades comunes en personas con TEA.
Puntos clave:
Dieta equilibrada y variada: La base es una alimentación rica en frutas, verduras, proteínas, cereales integrales y grasas saludables. Esto asegura el aporte de los nutrientes necesarios para el desarrollo y la función cerebral. (Hyman SL, et al. 2012. Nutrition and Dietary Interventions for Autism Spectrum Disorder: A Systematic Review. Pediatrics 130(5): 1004-1013.)
Atención a las sensibilidades sensoriales: Muchas personas con TEA presentan sensibilidades a las texturas, olores o sabores. Es importante respetar estas preferencias y ofrecer alimentos en diferentes presentaciones. (Cermak SA, et al. 2010. Sensory Preferences in Children with Autism Spectrum Disorders. Journal of Autism and Developmental Disorders 40(4): 490-501.)
Identificar posibles intolerancias o alergias: Algunas investigaciones sugieren una posible relación entre el TEA y la sensibilidad al gluten o la caseína (proteína de la leche). Si se sospecha de alguna intolerancia, es fundamental consultar con un médico o nutricionista para realizar las pruebas pertinentes y adaptar la dieta. (Millward C, et al. 2004. Gluten- and casein-free diets for autistic spectrum disorder. Cochrane Database of Systematic Reviews (2): CD003498.)
Regularidad en las comidas: Establecer horarios regulares para las comidas ayuda a crear una rutina y puede reducir la ansiedad. (Anderson GM, et al. 1987. Repetitive behaviors in autism: A review of psychological research and theory. Psychological Bulletin 102(1): 37-49.)
Hidratación: El agua es esencial para el buen funcionamiento del organismo. Asegúrate de que la persona con TEA beba suficiente agua a lo largo del día.
Recomendaciones específicas:
Priorizar alimentos ricos en omega-3: Presentes en pescados azules (salmón, atún, sardinas), semillas de chía y lino, nueces. El omega-3 es importante para el desarrollo cerebral y la función cognitiva. (Bent S, et al. 2011. A pilot randomized controlled trial of omega-3 fatty acids for autism spectrum disorder. Journal of Autism and Developmental Disorders 41(5): 545-554.)
Asegurar un buen aporte de vitaminas y minerales: Especialmente vitamina D, B6, B12, magnesio y zinc, que suelen estar relacionados con el funcionamiento del sistema nervioso. (Cannell JJ. 2008. Autism and vitamin D. Medical Hypotheses 70(3): 750-759.)
Limitar el consumo de alimentos procesados: Bollería industrial, snacks, refrescos, etc. Estos000000023.3 alimentos suelen ser ricos en azúcares, grasas poco saludables y aditivos que pueden afectar el comportamiento y la concentración. (Pelsser LM, et al. 2011. A randomised controlled trial into the effects of food on the behaviour of children from special schools. British Journal of Nutrition 105(12): 1681-1692.)
Evitar el exceso de azúcar: El azúcar puede provocar picos de energía y cambios de humor. Opta por endulzantes naturales con moderación, como la fruta o la miel. (Wolraich ML, et al. 1994. Effects of diets high in sucrose or aspartame on the behavior and cognitive performance of children. The New England Journal of Medicine 330(5): 301-307.)
Consejos adicionales:
Involucra a la persona con TEA en la preparación de alimentos: Esto puede ayudar a aumentar su interés por la comida y a probar nuevos alimentos.
Presenta los alimentos de forma atractiva: Corta las frutas y verduras en formas divertidas, utiliza platos y cubiertos coloridos.
Sé paciente y constante: Introducir nuevos alimentos puede llevar tiempo. No te desanimes si al principio hay rechazo.
Recuerda:
Estas son recomendaciones generales. Es fundamental consultar con un médico o nutricionista para obtener una evaluación individualizada y un plan de alimentación adaptado a las necesidades específicas de la persona con TEA.
El TEA no es una enfermedad, sino un espectro de condiciones que comparten características como:
Dificultades en la comunicación y la interacción social: Esto puede ir desde problemas para mantener una conversación hasta dificultades más amplias para entender normas sociales.
Intereses restringidos y comportamientos repetitivos: Algunas personas con TEA tienen intereses muy específicos o rutinas que necesitan seguir.
Procesamiento sensorial diferente: Algunos pueden ser muy sensibles a ciertos sonidos, luces o texturas, mientras que otros pueden parecer insensibles a estímulos que normalmente llamarían la atención.
El diagnóstico puede variar de leve a severo, dependiendo del nivel de apoyo que la persona necesite en su vida diaria.
El TEA se clasifica en tres niveles según la intensidad del apoyo que la persona necesita:
Nivel 1: Necesita apoyo
Las personas con este nivel pueden comunicarse y funcionar de manera relativamente independiente, pero necesitan apoyo en ciertas áreas, como habilidades sociales o manejo de intereses restringidos.
Nivel 2: Necesita apoyo sustancial
En este nivel, las dificultades para comunicarse y adaptarse al entorno son más marcadas. Las personas pueden necesitar ayuda constante para interactuar y participar en actividades diarias.
Nivel 3: Necesita apoyo muy sustancial
Este nivel implica desafíos significativos en comunicación, interacción social y comportamiento. Las personas suelen requerir asistencia intensiva para sus necesidades básicas y cotidianas.
Aunque cada caso es único, el desarrollo de las personas con TEA suele pasar por ciertas etapas:
Infancia temprana: Es común que los padres noten señales como falta de contacto visual, retraso en el habla o poco interés en interactuar con otros.
Edad preescolar: Aquí se hacen más evidentes las diferencias en habilidades sociales y de comunicación. La intervención temprana es crucial en esta etapa.
Etapa escolar: Los niños con TEA pueden enfrentar retos para adaptarse al entorno escolar, pero con las herramientas adecuadas pueden aprender y desarrollarse plenamente.
Adolescencia y adultez: Las habilidades sociales y de independencia pueden necesitar apoyo continuo, pero muchas personas con TEA logran llevar vidas plenas y productivas.
La alimentación juega un papel más relevante de lo que muchos imaginan en el desarrollo y bienestar de una persona con TEA. Aunque no existe una dieta "única" para el TEA, muchas familias han encontrado beneficios en ajustes alimenticios como:
Eliminar ciertos alimentos: Algunos estudios sugieren que reducir el consumo de gluten y caseína (proteínas del trigo y la leche) puede mejorar comportamientos en ciertos casos.
Suplementar con vitaminas y minerales: Los niños con TEA a veces presentan deficiencias de nutrientes como vitamina D, B12 o zinc, por lo que trabajar con un nutriólogo especializado es clave.
Fomentar una dieta equilibrada: Una alimentación rica en frutas, verduras, granos integrales y grasas saludables contribuye al bienestar general y puede mejorar el estado de ánimo y la energía.
Una de las claves para apoyar a los niños con TEA es el trabajo coordinado entre la escuela, la familia y los especialistas. ¿Por qué es tan importante?
En la escuela:
Adaptaciones curriculares: Personalizar la enseñanza según las necesidades del niño puede marcar una gran diferencia.
Capacitación del personal: Los maestros y asistentes deben estar preparados para entender y manejar comportamientos relacionados con el TEA.
En casa:
Refuerzo positivo: Celebrar pequeños logros motiva y genera confianza.
Rutinas consistentes: Las personas con TEA tienden a prosperar con horarios predecibles.
Colaboración constante: Mantener una comunicación fluida con la escuela y los terapeutas ayuda a alinear estrategias.
Terapias adicionales:
Terapia del lenguaje: Fundamental para mejorar la comunicación.
Terapia ocupacional: Ayuda a desarrollar habilidades motoras y de independencia.
Análisis conductual aplicado (ABA): Estrategia basada en reforzar conductas positivas y reducir conductas no deseadas.
Quiero cerrar esto con algo muy personal: ayudar a un niño con TEA es un reto que nos transforma como personas. No hay una receta mágica, pero sí un camino lleno de aprendizajes y pequeños grandes logros. Con paciencia y amor se pueden alcanzar grandes resultados. Si trabajamos juntos, apoyándonos mutuamente y celebrando cada paso, estaremos creando un futuro lleno de posibilidades para ellos.
El reciente estudio de José Iván Vega García, licenciado en Pedagogía por la Universidad Veracruzana, quien obtuvo mención honorífica, resalta una realidad crucial: existe un atraso en el aprendizaje de la lectoescritura en alumnos de educación primaria, ligado a factores familiares, personales y escolares.
Este hallazgo nos impulsa a reforzar nuestro compromiso con la lectoescritura temprana. No se trata solo de aprender letras y palabras, ¡es mucho más que eso! Es abrir las puertas a un mundo de oportunidades y sentar las bases para un futuro brillante, tal como lo demuestran diversos estudios científicos.
¿Por qué es tan importante la lectoescritura a temprana edad?
La ciencia nos da la respuesta:
Desarrollo Cerebral Óptimo: Los primeros años de vida son una ventana de oportunidad única. Según el Center on the Developing Child de la Universidad de Harvard, el cerebro de los niños crea un millón de conexiones neuronales por segundo durante los primeros años. La lectoescritura temprana estimula áreas clave del cerebro relacionadas con el lenguaje, la memoria y el pensamiento crítico. Un estudio publicado en la revista "Pediatrics" encontró que los niños que participan en programas de lectura en voz alta desde una edad temprana muestran una mayor activación en áreas cerebrales asociadas con la comprensión del lenguaje y la imaginación.
Mejor Rendimiento Académico: Una base sólida en lectoescritura es fundamental para el éxito en todas las áreas del aprendizaje. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), a través de su informe PISA, ha demostrado consistentemente que los estudiantes que leen por placer a diario obtienen mejores resultados en todas las materias. Además, un estudio de la "National Literacy Trust" en el Reino Unido encontró que los niños que leen y escriben con fluidez a los 7 años tienen más probabilidades de tener éxito en la escuela secundaria y la universidad.
Fomento de la Imaginación y la Creatividad: La lectura estimula la imaginación y la creatividad, habilidades esenciales para el siglo XXI. Un estudio publicado en la revista "Thinking Skills and Creativity" demostró que la lectura de ficción mejora la capacidad de los niños para comprender las emociones de los demás y pensar de forma creativa.
Fortalecimiento de la Autoestima y la Confianza: Aprender a leer y escribir genera en los niños una sensación de logro y confianza en sí mismos. La "American Academy of Pediatrics" recomienda la lectura diaria desde la infancia como una forma de promover el desarrollo emocional y social de los niños.
Preparación para el Futuro: En un mundo cada vez más competitivo, la lectoescritura es una habilidad esencial. Un informe de la "UNESCO" destaca que la alfabetización es fundamental para el desarrollo sostenible y la participación plena en la sociedad.
En nuestro preescolar, a través de métodos lúdicos y con apoyo de la tecnología, como sugiere Vega García, y siguiendo las recomendaciones de investigaciones científicas, fomentamos el amor por la lectura y la escritura de una forma divertida y efectiva. Contamos con un equipo docente altamente capacitado y comprometido con el desarrollo integral de cada niño.
Invierte en el futuro de tu hijo. ¡La lectoescritura temprana es la llave que abre las puertas al éxito!
Contáctanos para más información y descubre cómo podemos ayudar a tu pequeño a brillar.
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Cuando hablamos de preparar a un niño para la vida, muchas veces pensamos en grandes etapas como la universidad o la elección de una carrera. Sin embargo, el verdadero éxito comienza mucho antes, en los primeros años de vida. Aquí es donde la lectura temprana juega un papel crucial, no solo para el desarrollo académico, sino también para el emocional, social y cognitivo de los pequeños.
La neurociencia nos ha mostrado que los primeros años de vida son una explosión de actividad cerebral. Según el neurocientífico Stanislas Dehaene, especialista en lectura y aprendizaje, al leer con un niño, el cerebro activa simultáneamente diversas áreas:
El área visual: interpreta las formas de las letras y palabras.
El área auditiva: asocia los sonidos con las letras.
El área del lenguaje: da sentido al significado de las palabras y estructuras gramaticales.
Este trabajo en equipo entre diferentes regiones del cerebro es esencial para desarrollar habilidades lingüísticas, pensamiento lógico y memoria a largo plazo. Pero hay más: la lectura también fomenta la empatía y la comprensión emocional. Por ejemplo, cuando un niño escucha una historia sobre un personaje que enfrenta un desafío, su cerebro no solo procesa las palabras, sino que también simula emocionalmente lo que siente el personaje.
Leer con los niños antes de los 6 años tiene un impacto directo en su autoestima y manejo de emociones. ¿Cómo? Porque cada historia leída refuerza la conexión entre el adulto y el niño, generando un vínculo de seguridad. Un pequeño que se siente amado y apoyado en un momento de lectura está más dispuesto a explorar el mundo con confianza.
Además, la lectura en voz alta introduce conceptos de empatía, diversidad y resolución de conflictos. Al identificarse con personajes de cuentos, los niños aprenden a interpretar emociones propias y ajenas, una habilidad clave para la convivencia social.
La plasticidad cerebral en esta etapa es un fenómeno fascinante. Según investigaciones de la Universidad de Harvard, el cerebro de un niño de 0 a 6 años establece millones de conexiones neuronales cada segundo. Estas conexiones son como autopistas que facilitan la adquisición de habilidades complejas.
En el caso de la lectura, la conciencia fonética —la capacidad de identificar y manipular sonidos— y la asociación entre sonidos y letras son procesos fundamentales que se desarrollan de forma más natural antes de los 6 años. Introducir la lectura después de esta etapa es posible, pero requiere mucho más esfuerzo, y los resultados no son tan profundos.
Las ventajas de fomentar la lectura en la primera infancia no terminan en el jardín de niños. Un estudio del Instituto de Desarrollo Infantil de la Universidad de Londres encontró que los niños que leen temprano:
Tienen mejores habilidades de comprensión lectora y matemática en la primaria.
Son más resilientes frente a desafíos académicos y sociales.
Tienen mayor probabilidad de culminar sus estudios superiores.
Más allá de lo académico, estos niños también desarrollan un amor innato por el conocimiento. Se convierten en adultos que buscan respuestas, exploran nuevas ideas y son capaces de pensar críticamente.
Aquí te dejamos algunas estrategias para aprovechar esta etapa clave:
Crea un rincón de lectura: Un espacio especial con libros atractivos que los niños puedan explorar por sí mismos.
Sé constante: Leer juntos todos los días, aunque sea solo 10 minutos, marca una gran diferencia.
Hazlo divertido: Usa voces, gestos y preguntas para hacer que la historia cobre vida.
Elige libros adecuados: Para los más pequeños, libros con ilustraciones grandes y textos sencillos son ideales. Conforme crecen, añade cuentos con historias y personajes interesantes.
Relaciónalo con su mundo: Busca libros que conecten con sus intereses y experiencias diarias.
El impacto de la lectura temprana va más allá del niño: transforma familias, comunidades y sociedades. Cuando creamos un ambiente donde leer es un hábito, estamos dando un mensaje claro: el aprendizaje es valioso, y las historias son una ventana al mundo.
No se trata solo de enseñar a leer, sino de enseñar a amar la lectura. Como adultos, tenemos la oportunidad de ser guías en este camino, ofreciendo libros como puertas a la imaginación, al conocimiento y a un futuro lleno de posibilidades.
Hoy, más que nunca, recordemos: un niño que ama leer será un adulto que sabe pensar.
Imagínate que el cerebro de un niño pequeño es como una esponja: todo lo que recibe lo absorbe con una facilidad increíble. Ahora, ¿qué pasa si le damos herramientas para que esa esponja no solo absorba, sino que conecte, relacione y cree nuevas habilidades? Esto es precisamente lo que ocurre cuando estimulamos la conciencia fonética y fomentamos el gusto por la lectura en la primera infancia.
La conciencia fonética es la capacidad de identificar, combinar y manipular los sonidos en las palabras. Es el primer paso para aprender a leer. Por ejemplo, cuando un niño comprende que la palabra "sol" está formada por los sonidos /s/, /o/ y /l/, está desarrollando esta habilidad.
Estudios de neurociencias han demostrado que el desarrollo de la conciencia fonética activa áreas del cerebro relacionadas con el lenguaje, como el giro angular y el área de Broca. Estas conexiones no solo facilitan la lectura, sino que también son esenciales para el desarrollo de la comprensión y la expresión verbal. Según un artículo de la revista Nature Neuroscience, cuanto más temprano se estimulan estas áreas, mayor es el impacto en el desarrollo cognitivo general del niño.
Antes de los 6 años, el cerebro atraviesa un período de máxima plasticidad cerebral, lo que significa que tiene una capacidad increíble para crear y reforzar conexiones neuronales. Es como si el cerebro estuviera en su etapa más moldeable, dispuesto a aprender de todo lo que lo rodea.
En esta etapa, introducir a los niños al mundo de la lectura no solo estimula su conciencia fonética, sino que también mejora su vocabulario, su capacidad de atención y su comprensión del mundo. Un estudio del Centro de Neurociencia Cognitiva de la Universidad de Stanford encontró que los niños expuestos a la lectura temprana mostraban un mayor desarrollo en las áreas del cerebro relacionadas con la alfabetización y la resolución de problemas.
Fomentar la lectura antes de los 6 años no solo impacta el rendimiento académico, sino que también fortalece habilidades sociales y emocionales. Cuando un niño disfruta de un libro con un adulto, aprende sobre emociones, empatía y relaciones humanas. Además, se sientan las bases para un aprendizaje independiente, ya que leer se convierte en una herramienta para explorar el conocimiento por cuenta propia.
Por otro lado, estudios de la Asociación Internacional de Alfabetización concluyen que los niños que desarrollan una sólida conciencia fonética en los primeros años tienen más probabilidades de dominar la lectura y la escritura en niveles avanzados.
Juegos de sonidos: Actividades como rimar palabras o identificar qué sonido inicial tiene cada palabra.
Lectura diaria: Leer cuentos juntos no solo crea vínculos emocionales, sino que introduce a los pequeños al vocabulario y la estructura del lenguaje.
Materiales visuales y auditivos: Usar canciones infantiles, tarjetas con letras y sonidos para asociar lo visual y lo auditivo.
Ambientes ricos en palabras: Decorar con libros y materiales escritos a la vista de los niños.
Iniciar a los pequeños en la lectura y la conciencia fonética antes de los 6 años es darles una ventaja invaluable. Es preparar su cerebro para aprender más rápido, resolver problemas y, sobre todo, disfrutar de un mundo lleno de historias, conocimientos y posibilidades.
No esperemos a que sea demasiado tarde. Invirtamos en el presente para transformar el futuro de nuestros niños. ¡La lectura es el mejor regalo que podemos darles!
Sí, lo que pasa en la primera infancia marca la diferencia para siempre. Es en esta etapa, durante la educación inicial y preescolar, donde el cerebro está más receptivo, con una capacidad de aprendizaje y desarrollo como nunca volverá a tener. Pero, ¿por qué esto es tan crucial?
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Chicago, liderado por el economista James Heckman, demostró que los niños que asisten a programas de educación inicial y preescolar tienen ventajas significativas en habilidades matemáticas, de lenguaje y de resolución de problemas, en comparación con aquellos que no tuvieron esta oportunidad. Lo más interesante es que, incluso si más adelante reciben apoyos educativos adicionales, los niños que no pasaron por estas etapas nunca alcanzan el mismo nivel cognitivo que los que sí lo hicieron.
¿Por qué sucede esto? Durante los primeros años de vida, el cerebro experimenta un proceso llamado "plasticidad cerebral". Esto significa que está formando conexiones neuronales a una velocidad impresionante, especialmente en áreas relacionadas con el lenguaje, la lógica y el desarrollo emocional. Si no se aprovecha este momento único, el potencial de esas conexiones se reduce con el tiempo.
La educación inicial y preescolar no solo enseña números y letras, sino que también sienta las bases para habilidades sociales y valores como la responsabilidad, el trabajo en equipo y la empatía. Es en estas etapas donde los pequeños comienzan a explorar el mundo, a aprender a gestionar emociones, a relacionarse con otros y a desarrollar la confianza en sí mismos.
De hecho, la UNESCO resalta que invertir en educación en la primera infancia no solo mejora el rendimiento académico futuro, sino que también tiene un impacto positivo en la vida adulta. Los niños que pasan por una buena educación inicial son más propensos a graduarse, conseguir empleo y tener mejores relaciones sociales.
Entonces, ¿por qué esperar hasta la universidad para invertir en el futuro de nuestros hijos? Como sociedad, debemos entender que la verdadera base del éxito comienza en las aulas de educación inicial y preescolar, donde se forma el carácter, las habilidades cognitivas y las herramientas emocionales que los acompañarán toda la vida.
La invitación está hecha: apostemos por la etapa más valiosa de la vida. Porque lo que aprendan hoy, lo reflejarán mañana.
¿Tienes algún pequeño en casa? ¡Es el momento de ofrecerle el mejor comienzo posible!